Con el periódico del lunes, más de uno pensaba que Fluminense llegaría a Matute con una bolsa para la cantidad de goles que iba a anotarle a los dirigidos por Alejandro Restrepo. Incluso con las 6 bajas importantes que tenían, los actuales campeones de la Copa Libertadores eran completamente favoritos para quedarse con los tres puntos. Sin embargo, la realidad fue completamente diferente y los brasileños terminaron rescatando un empate frente a un aguerrido Alianza Lima que estuvo muy cerca de la gran hazaña.
En principio, los blanquiazules se mostraron muy compactos en su área y ejecutaron la idea de Alejandro Restrepo casi a la perfección. No dejar espacios atrás, cortar los pases, mordieron cuando fue necesario y aprovecharon los pocos ataques que tuvieron en el partido. Todo estaba saliendo bien. Los hinchas estaban felices en las tribunas pero, como bien dice el dicho, "goles que no haces, goles que te hacen", los íntimos perdieron puntos.
En el inicio del primer tiempo, Alianza Lima fue ampliamente superior a Fluminense. A pesar que los brasileños tuvieron un mayor porcentaje de la posesión del balón (77% contra 23%), fueron los íntimos quienes tuvieron las ocasiones más claras de partido, con gol incluido, mientras que el campeón de América no registró ningún remate a portería.
Atrás, los blanquiazules estaban muy bien plantados. Zambrano, Garcés y Ramos se complementaron bastante bien para ser su segundo partido que arrancan juntos. Por las bandas, Juan Pablo Freytes y Marco Huamán se enfrentaron a jugadores de gran nivel como Marcelo y Samuel Xavier, quienes no lograron destacarse. Incluso Felipe Melo no pudo desplegar su fútbol y fue uno de los jugadores más discretos de Fluminense, tanto así que fue sustituido en el segundo tiempo.
Sobre el final del primer tiempo, Alianza Lima estaba ganando 1-0 a Fluminense con una soberbia definición de Kevin Serna, quien improvisó y lanzó un potente disparo desde fuera del área, desatando la euforia entre los hinchas que llenaron las tribunas del Alejandro Villanueva. Sin embargo, luego llegó la parte desagradable del encuentro.
Si hay un nombre en el que muchos hinchas aliancistas están señalando como uno de los principales responsables de este amargo empate, ese es el de Cecilio Waterman. El delantero panameño, quien venía de anotar 5 goles en 9 fechas del fútbol peruano, tuvo en sus pies la gran oportunidad de no solo marcar uno, sino dos goles y dejar bien posicionado a Alianza Lima de cara al final del partido.
La primera oportunidad la tuvo cerca del final del primer tiempo. Kevin Serna se deshizo de su marcador y envió un centro preciso rasante entre dos defensores para que el panameño simplemente empujara el balón. Sin embargo, su disparo fue demasiado suave y terminó desperdiciando la oportunidad de marcar el primero de la noche.
Si en la primera oportunidad uno podía encontrar peros a esa jugada, como que no había empalmado bien el balón o que tenía marcadores encima, el segundo fallo es totalmente imperdonable. Al comienzo de la segunda mitad, Cecilio Waterman quedó mano a mano con el arquero Fábio. Solo tenía que definir cruzado, pincharla o incluso darle un pase a Kevin Serna, pero su disparo terminó lejos y desaprovechó una gran oportunidad para convertir el segundo gol. Error que más tarde terminarían pagando caro.
Por algo es el campeón de América. Por algo venció a Boca Juniors en la final y luego a LDU Quito para obtener la Recopa. Por algo cuenta con un equipo lleno de figuras. En la única jugada clara que tuvieron, y ni siquiera fue algo planificado, sino que surgió de un tiro libre, Marquinhos encontró el empate tras una desatención de Sebastián Rodríguez, quien no logró marcarlo. Fue la única oportunidad que tuvo Fluminense y la aprovecharon para castigar a los blanquiazules.
Previo al gol de Fluminense, Alejandro Restrepo había sustituir a Kevin Serna, el mejor futbolista del campo y lo reemplazó por Franco Zanelatto. Sin embargo, este terminó jugando más retrasado e incluso estuvo bastante desaparecido durante los minutos que estuvo en cancha.
La decisión fue muy criticada, ya que los brasileños estaban dejando espacios atrás y se podía armar una contra perfecta. Sin Serna y con Waterman solo en el ataque, los blanquiazules perdieron profundidad. Además, Restrepo optó por el ingreso de Hernán Barcos, quien tuvo poca o ninguna participación en el encuentro, y sobre el final, Aldair Fuentes ingresó en lugar de Cabellos.
Aquí, el error quizás debió haber sido no colocar a un jugador revulsivo como Cristian Neira, quien había demostrado en anteriores cotejos que puede ser de mucha ayuda a la hora de atacar y crear situaciones de gol. También se pudo haber considerado a Gabriel Costa o Jhamir D'Arrigo, que suelen jugar por las bandas e ir constantemente hacia el fondo.
Tras este amargo empate, que pudo ser una victoria tranquilamente para Alianza Lima, los íntimos tendrán una dura prueba ante Cerro Porteño en Paraguay el próximo miércoles 10 de abril.
Marcelo disputando un balón con Huamán. Foto: La República/Luis Jiménez