Conmoción y lágrimas en el aeropuerto de Muan tras el trágico accidente de avión en Corea del Sur
El hedor a gasolina envuelve el Aeropuerto Internacional de Muan. Al otro lado del cordón policial pueden verse asientos, maletas y trozos de metal torcidos desperdigados en el suelo, a pocos metros de los restos siniestrados del vuelo 2216 de la aerolínea surcoreana Jeju Air. El accidente procovó la muerte de 179 personas.
El Boeing 737-800, que realizaba el trayecto entre Bangkok, capital de Tailandia, y Muan, ciudad al sudoeste de Corea de Sur, se estrelló el domingo mientras intentaba realizar un aterrizaje de emergencia.
El avión se estrelló contra una pared, y estalló en llamas.
Los equipos de rescate lograron controlar el incendio, pero solo consiguieron rescatar a dos miembros de la tripulación, los únicos supervivientes de un vuelo con 181 personas a bordo.
Entrada la tarde, unos focos iluminaron los restos de metal torcidos al tiempo que una grúa amarilla levantaba el fuselaje, lo que permitió a las autoridades proseguir su operación de búsqueda y rescate.
En el lugar del accidente solo se oyen los flashes de las cámaras fotográficas y las voces de los periodistas. Sobre el asfalto pueden verse restos de folletos del Duty Free, de guantes sanitarios de la tripulación, y la cola carbonizada del avión.
Dentro de la terminal, los familiares de las víctimas se agruparon a la espera de noticias, muchos de ellos conmocionados y afligidos.
Las pantallas que normalmente exponen los horarios de llegadas y salidas mostraban los nombres, las fechas de nacimiento y las nacionalidades de las víctimas.
"Uno de mis hijos iba a bordo del avión (...) Todavía no ha sido identificado", dijo a AFP un hombre mayor, que pidió no usar su nombre, en la sala de espera del aeropuerto.
- Tres años -
Gritos y llantos llenaron el aeropuerto cada vez que las víctimas fueron identificadas.
Muchos de los pasajeros, la mayoría surcoreanos, salvo dos tailandeses, volvían a sus hogares tras las vacaciones de invierno.
"Mi hermana pequeña se ha ido al Cielo hoy", Jo, una mujer de 65 que solo dio su apellido, dijo a AFP.
Su hermana había estado de vacaciones en Bankgok con sus amigos, añadió la mujer, que llevaba una mascarilla y un gorro de lana gris.
"Mi marido está intentando averiguar si fue identificada", dio Jo.
El avión transportaba a 175 pasajeros y seis tripulantes.
Según las autoridades, el pasajero más joven tenía tres años, y el más mayor 78.
Entre los niños fallecidos en el accidente, cinco tenían menos de diez años, dijeron las autoridades citando el manifiesto de pasajeros.
- Minuto de silencio -
El domingo, las televisiones surcoreanas interrumpieron sus emisiones de fin de año para informar sobre el trágico incidente, y se guardó un minuto de silencio en diferentes eventos deportivos que tuvieron lugar el mismo día.
Se trata del accidente de avión más mortífero de Corea del Sur, país sumido en una crisis política sin precedentes tras la suspensión del presidente Yoon Suk Yeol, después de su efímera instauración de la ley marcial.
El Parlamento destituyó a Yoon el 14 de diciembre, y también, el viernes, a su sustituto interino, el primer ministro Han Duck-soo, dejando el país en manos de su tercer líder en tres semanas.
El nuevo presidente interino, el ministro de Finanzas Choi Sang-mok, se desplazó el domingo por la tarde a Muan y presidió una reunión de emergencia del gobierno.
A causa del accidente, varios grupos de la sociedad civil están considerando aplazar las manifestaciones masivas, organizadas para presionar a los jueces de la Corte Constitucional a validar la suspensión de Yoon.
Las autoridades indicaron que las pistas del aeropuerto de Muan permanecerán cerradas una semana, al tiempo que los investigadores determinan las causes del accidente.
Varios testimonios desgarradores han sido compartido en redes sociales.
Entre ellos, una captura de pantalla de los últimos mensajes entre un pasajero y su familia, compartida de forma masiva por medios locales.
El mensaje del padre, y pasajero, enviado a las 09H01 hora local, decía: "Espera, un pájaro ha quedado atascado en el ala. No podemos aterrizar. ¿Debería dejar un testamento?".
Su hijo respondió, a las 09h37, : "¿Por qué no consigo llamarte?".
El mensaje nunca fue leído.
kjk-hs/ceb/mtp/amp/eg
undefined