Intolerancia en Miraflores, por Mirko Lauer
"Es interesante advertir que la embajadora de Alemania ha invitado al alcalde de Lima a acompañarla al LUM para informarse sobre su naturaleza y su actuación".

Costó gran esfuerzo tener un Lugar de la Memoria, la Tolerancia y la Inclusión Social, LUM. Esencialmente se trata de un museo y de un centro de actividades cívicas. La República Federal de Alemania lo puso en marcha financieramente, y luego lo respaldó ante quienes se resisten a su existencia. Todavía tiene que seguir defendiendo su iniciativa.
El proyecto fue lanzado en el 2010 por una Comisión de Alto Nivel presidida por Mario Vargas Llosa. Desde entonces el LUM ha venido desarrollando sus actividades bajo sucesivos gobiernos, comenzando con el de Ollanta Humala en el 2015. Con el tiempo sus enemigos más furibundos descubrieron que no se trataba de favorecer a Sendero Luminoso, ni mucho menos.
En sus ocho años de existencia el local de la bajada San Martín ha sido tema obligado para quienes han buscado una polémica fácil. La presentación de horrores propiciados por la intolerancia desagrada a muchos actores de la política, que buscan el olvido de eso, o simplemente no comprenden la idea misma del LUM.
Presentar en el LUM un informe de Amnistía Internacional sobre protesta y derechos humanos bajo el actual gobierno es de toda lógica. Cerrar el local de Miraflores con un argumento municipal y espeso ha lanzado a la notoriedad un texto que de otro modo hubiera tenido menos publicidad, puesto que no se trata de la opinión de las Naciones Unidas.
Es interesante advertir que la embajadora de Alemania ha invitado al alcalde de Lima a acompañarla al LUM para informarse sobre su naturaleza y su actuación. Rafael López Aliaga ha propuesto entregar el lugar a las FF. AA. y la PNP, como si a tales instituciones les faltaran auditorios y museos para promover memoria y tolerancia.
Evidentemente el alcalde que ha cerrado el LUM y con eso amordazado a Amnistía Internacional viene del mismo partido que López Aliaga. Aun así, en enero pasado discrepó del alcalde de Lima en lo de entregar el LUM a las FF. AA. y la PNP. Es obvio que él sí entendió que el lugar no es de propiedad municipal, sino del Ejecutivo.
PUEDES VER: Lavado de ropa, comidas y pasajes: los pagos no declarados de Shimabukuro a Boluarte en campaña

El Ministerio de Cultura ha reaccionado positivamente, precisando que el LUM es un espacio de ese ministerio, y que se dedicará a que sea reabierto en el menor tiempo posible.







