El tío Pedro y sus escribidores

"Castillo ha asumido solo la responsabilidad del golpe, mientras los que lo manejaron como tonto útil requieren sacarlo de la cárcel antes que su desesperación por la prisión lo lleve a cantar quiénes fueron sus escribidores".

Les urge sacar a Castillo de la cárcel para que no los delate.

Aníbal Torres reapareció anteayer en un evento en la UNMSM con las mismas arengas incendiarias que lanzaba cada tarde en palacio de gobierno junto a ese hombre que fungía de presidente de la república, pero solo era un tonto útil de unos pseudorevolucionarios inescrupulosos.

El expremier alocado —DRAE: tiene cosas de loco, parece loco y revela poca cordura— estuvo junto a Héctor Béjar, el primer canciller de Castillo puesto en Torre Tagle para poner la diplomacia peruana al servicio de intereses foráneos, quien lanzó iniciativas como la expropiación de la televisión para que esta transmita debates como el que él protagonizó en San Marcos junto con el exjuez supremo Duberlí Rodríguez, quien fue el abogado que impidió que Torres fuera a prisión preventiva alegando una grave enfermedad que, felizmente, estuvo bien camuflada en sus fogosas intervenciones de anteayer.

Una coincidencia en la extravagante jornada oratoria del martes fue que el 7 de diciembre no hubo golpe —ni intento de hacerlo— y que Castillo está secuestrado.

Es el mismo argumento promovido desde el exterior por AMLO, Evo Morales, Gustavo Petro, junto con unos abogados argentinos convocados para la causa, quienes pretenden la liberación del golpista torpe que no pudo concretar la misión que le señalaron sus patrones, quienes hoy niegan su involucramiento en el putsch.

La evidencia, sin embargo, como la divulgada por ‘Panorama’, revela que Castillo tuvo cómplices como la expremier Betssy Chávez, quien milita en la agrupación Perú Democrático liderada por el antídoto de las “pelotudeces democráticas”, que es el congresista Guillermo Bermejo, quien puso a dos cercanos colaboradores suyos —Raúl Noblecilla y Ronald Atencio— en palacio.

Además, el sentido común indica que Castillo es incapaz de escribir el discurso calcado del de Alberto Fujimori del 5 de abril de 1992, con añadidos de obvia autoría de Torres, quien en la ‘entrevista’ en el blog El Salto pone un párrafo para eludir su complicidad.

Castillo ha asumido solo la responsabilidad del golpe, mientras los que lo manejaron como tonto útil requieren sacarlo de la cárcel antes que su desesperación por la prisión lo lleve a cantar quiénes fueron sus escribidores.

Augusto Álvarez Rodrich.

Claro y directo

Economista de la U. del Pacífico –profesor desde 1986– y Máster de la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, Harvard. En el oficio de periodista desde hace más de cuatro décadas, con varios despidos en la mochila tras dirigir y conducir programas en diarios, tv y radio. Dirige RTV, preside Ipys, le gusta el teatro, ante todo, hincha de Alianza Lima.