Poesía de entre años
“Lo que aquí dice el casuario no es una promesa, sino un enigma. Atencio tiene una historia que contar, es en torno de la paternidad y está hecha de experiencias”.

En una antología de poesía hecha por el propio autor suele haber de todo. En cambio esta de Rocío Silva Santisteban es muy homogénea. No nos ha querido dar un muestrario de su trayectoria, sino una imagen compuesta de su sentimiento, con el acento puesto en la intimidad y la evocación. En medio de esto hay estilos de sus diversas temporadas, que cruzan como ráfagas ante nuestra mirada.
Una herida menor. Antología poética 1983-2022 (Lima, Animal de invierno, 2022) Es una suma que uno va leyendo con un leve temblor. ¿En qué momento va a crecer esa herida, y hacia dónde? ¿Algunos diálogos no son demasiado privados como para dirigirse al lector? La antología personal se vuelve bipersonal, y la lectura cada vez más curiosa.
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En este su primer poemario Gabriela Atencio se presenta en escena literalmente como un ave extraña: dos metros de alto, garras letales, un colorido extraordinario. Palabra del casuario (Lima, Alastor Editores, 2022) es un discurso sutil, desde el silencio de un animal excepcional. A los bellos colores corresponden fuertes versos.
Lo que aquí dice el casuario no es una promesa, sino un enigma. Atencio tiene una historia que contar, es en torno de la paternidad y está hecha de experiencias. Va de lo confesional, en el poema que da el título, hasta el cosmopolita y sofisticado “Lobster”, mi favorito. Un crustáceo que sancochado en su bello color hace modesto pendant con un casuario.
Retablo (Lima, Panóptico, 2022), de Jorge Díaz Untiveros es, si existe la expresión, un poemario de historia. El poeta recoge momentos en la vida de su familia desde 1919, y que muy hacia el final lo incluyen (nació en 1980). La variedad de aproximaciones al tema hace honor al título del libro, el cual trae retratos, viñetas, reflexiones, nostalgias por supuesto.
Bajo una apariencia convencional, si fuera prosa, el poemario es de una intensa originalidad. Mucho de lo recogido transcurrió en el valle del Mantaro, pero esta es una poesía que viaja por el Perú siguiendo la vida de sus protagonistas, casi todos parientes de Jorge Díaz Untiveros. Nos quedamos, pues, con un álbum muy intenso. “!Ay el transcurrir de los años! /¡Ay mis retratos de familia!” dice el autor.



