¡Histórico! Prohíben mutilación genital femenina tras 30 años y permiten la libre circulación de mujeres en Sudán
Nueve de cada diez niñas del país africano han sido mutiladas y las mujeres no eran permitidas de viajar sin la autorización de un familiar varón en pleno 2020. Estas normas machistas se acabaron con la eliminación de leyes islámicas.
Un gran avance en la lucha contra la violencia hacia las mujeres. El primer ministro de Sudán, Abdalla Hamdok, anunció leyes que prohíben la mutilación genital femenina y permiten la libre circulación de estas junto a sus hijos, pues necesitaban el permiso de un familiar hombre para hacerlo.
Si bien ya existían estados del país africano donde ya se habían vetado estas prácticas de violencia contra la mujer, estas continuaban siendo aplicadas. Con las nuevas leyes se impondrá una pena de tres años de cárcel a quien realice la mutilación genital femenina.
Se estipula que el 87 % de las mujeres de Sudán entre 14 y 49 años han sufrido de mutilación genital, de acuerdo la Organización de las Naciones Unidas (ONU)
En 29 países de África y Medio Oriente se continúa perpetuando este tipo de violencia contra la mujer, la cual causa infecciones urinarias, uterinas, renales, quistes, problemas reproductivos y dolor al mantener relaciones sexuales, de acuerdo al Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
Más de 200 millones de mujeres y niñas han sufrido de Mutilación Genital Femenina en 30 países de África, Oriente Medio y Asia.
Estas medidas son parte de las reformas del gobierno de transición de Abdalla Hamdok, quien derrocó al gobierno militar de Omar Al Bashir a finales del 2019. Al Bashir se proclamó presidente en 1989 tras las guerras civiles vividas al sur de Sudán en la década de los 80 e impuso las leyes islámicas, las cuales ejercen violencia machista hacia las mujeres y niñas.
¿Qué es mutilación genital femenina?
La ONU define la mutilación genital femenina como “una práctica que implica la alteración o lesión de los genitales femeninos por motivos no médicos”, tales como los labios vaginales y el clítoris. Esta práctica es reconocida como una violación grave de los derechos humanos, la salud y la integridad de las mujeres y las niñas.
Una de cada cuatro mutilaciones es realizada en centros sanitarios. Estas pueden causar complicaciones de salud a corto y largo plazo, incluido dolor crónico, infecciones, sangrados, mayor riesgo de transmisión del VIH, ansiedad y depresión, complicaciones durante el parto, infecundidad y, en el peor de los casos, la muerte.
Esta práctica se concentra en alrededor de 30 países de África, Oriente Medio, Asia y algunas pequeñas comunidades de Latinoamérica.