Beneficios del Seguro Social para 'freelancers' en EEUU: cuánto se paga y qué beneficios se reciben
Los trabajadores independientes en Estados Unidos deben cumplir con aportes al Seguro Social. Aquí explicamos cuánto deben abonar y qué derechos adquieren al hacerlo.

Trabajar como 'freelancer' en Estados Unidos implica no solo autonomía y flexibilidad, sino también nuevas responsabilidades fiscales. A diferencia de los empleados tradicionales, quienes comparten los aportes con sus empleadores, los trabajadores por cuenta propia deben cubrir por completo sus contribuciones al Seguro Social. Este sistema no solo representa una obligación legal, sino también una puerta de acceso a beneficios clave como la jubilación y la cobertura médica.
El impuesto correspondiente, conocido como Self-Employment Tax, representa un porcentaje significativo de las ganancias netas de estos profesionales. Aunque muchos desconocen los detalles, este aporte garantiza acceso a programas federales vitales como Medicare y la seguridad en caso de incapacidad. Conocer el monto exacto, las fechas de pago y los requisitos para acceder a los beneficios es esencial para evitar sanciones y construir un respaldo financiero a largo plazo.
¿Qué es el Self-Employment Tax y cómo se calcula?
El Self-Employment Tax es un impuesto obligatorio para quienes trabajan de manera independiente en Estados Unidos. Cubre los aportes al Seguro Social (Social Security) y al programa de salud federal Medicare. En total, representa un 15.3 % de los ingresos netos. Esta cifra se divide en un 12.4 % destinado al Seguro Social y un 2.9 % para Medicare. A diferencia de los asalariados, que solo pagan la mitad gracias al aporte de su empleador, los freelancers deben cubrir el monto completo.
Sin embargo, existe un ajuste que puede reducir el impacto del pago. El impuesto no se aplica sobre el 100 % de los ingresos, sino sobre el 92.35 % de la utilidad neta. Por ejemplo, si un trabajador independiente gana 100,000 dólares en un año, el cálculo del impuesto se realiza sobre 92,350 dólares. Esta fórmula permite un leve ahorro, aunque no exime de la obligación de pagar puntualmente.
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¿Cuándo y cómo deben pagar los 'freelancers'?
Los ingresos superiores a 400 dólares anuales obligan al trabajador independiente a presentar una declaración fiscal y a contribuir al Self-Employment Tax. Para ello, el formulario 1040-ES del IRS permite calcular y enviar pagos estimados de forma trimestral. Este modelo anticipado busca que los contribuyentes no esperen hasta fin de año, distribuyendo la carga fiscal en cuatro cuotas.
Las fechas clave suelen ubicarse en abril, junio, septiembre y enero. Cada trimestre, el profesional debe calcular sus ingresos y realizar el pago correspondiente. Ignorar estas obligaciones puede generar multas, recargos e incluso problemas legales. Por esta razón, es recomendable separar ingresos personales y profesionales, mantener un registro contable detallado y, en lo posible, contar con asesoría de un contador especializado en impuestos para autónomos.
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Beneficios que otorgan estos aportes al Seguro Social en Estados Unidos
Más allá de la obligación fiscal, los aportes al Seguro Social ofrecen beneficios concretos. El sistema reconoce el esfuerzo de los trabajadores independientes y les otorga derecho a una pensión por jubilación. Para acceder, se deben acumular 40 créditos laborales, lo que equivale a aproximadamente 10 años de trabajo activo. Cada crédito se gana al alcanzar un mínimo de ingresos anuales establecidos por el gobierno.
Además de la pensión, el sistema incluye beneficios por discapacidad, cobertura para familiares sobrevivientes y acceso a Medicare. Estos derechos solo están disponibles si se realizan los aportes completos. Por ello, subestimar la importancia del Self-Employment Tax puede perjudicar gravemente la seguridad futura del trabajador. Reportar de forma íntegra los ingresos no solo es una obligación, sino una inversión en estabilidad.
















