Encabezados por la organización indígena Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), hombres y mujeres, estudiantes y trabajadores, junto a gremios laborales y culturales se pronunciaron en las calles contra el Ejecutivo y el Legislativo por el grave deterioro de la democracia en el país.
La bulliciosa marcha partió del frontis del Palacio de Justicia por el jirón Lampa y se dirigió hacia el parque Universitario para ingresar a la avenida Abancay con el propósito de llegar al Congreso de la República
En el camino, los manifestantes expresaron fuertes críticas al gobierno de Dina Boluarte y también a los miembros del Legislativo. Mientras exigían a voz en cuello la renuncia de los ministros de Educación y Cultura, otras demandas estaban escritas en carteles que llevaron en alto para hacerlas más visibles.
“No matarás ni con hambre ni con bala”, “El agua es un derecho, no se privatiza”, “No a la censura de nuestras voces”, “En defensa de nuestros derechos y territorios”, “Democracia con derechos humanos para todos”, “Los universitarios también te repudiamos”, “En defensa del cine indígena”, “No más dictadura, en defensa del arte y la cultura”, fueron algunas de ellas.
A su paso, la marcha fue alentada por grupos de sikuris y el estruendo de batucadas.
El presidente de Aidesep, Jorge Pérez Rubio, dijo a La República que los representantes de los pueblos indígenas amazónicos llegaron a Lima para defender sus derechos y el territorio amazónico ante las cuestionadas leyes que viene aprobando el Congreso.
“Hemos venido a protestar por las leyes que está dando el Congreso de la República en contra de los derechos colectivos y fundamentales de los pueblos, como por ejemplo la Ley Forestal que trata de debilitar el control del territorio de los pueblos indígenas. También la ley mordaza que a través de APCI quiere controlar a las organizaciones indígenas que defendemos derechos humanos”, sostuvo el dirigente.
Jorge Pérez también exigió que no haya impunidad en el caso de los más de 30 líderes indígenas asesinados. Asimismo, cuestionó a los ministros de Educación y de la Mujer por tratar de minimizar la violación de niñas awajún en Condorcanqui, región Amazonas, considerando el delito como práctica cultural. “Pedimos su renuncia”, exigió.
Cuando llegaron al parque Universitario, el grito fue: “Dina, Dina, Dina, traidora y asesina”. Custodiados por el grupo motorizado Los Halcones, de la Policía Nacional, la marcha ingresó a la avenida Abancay. Allí vocearon: “El pueblo en las calles por culpa del gobierno”, “Pueblo, escucha, el país está en peligro”.
En este lugar se notó la presencia de la congresista Ruth Luque. Al ser abordada por La República dijo que la marcha liderada por Aidesep responde al abandono de la población y de la Amazonía por parte del Estado.
“No solo por los asesinatos de líderes indígenas, sino también por la creciente economía ilegal que está afectando a la población. Asimismo, tiene que ver con los paquetazos anti ambientales, anti democráticos y anti institucionales que se han dado en el Congreso de la República con el aval del Poder Ejecutivo”, declaró la presidenta de la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos. Dijo que su presencia en la marcha era para acompañarlos y asegurar que el ejercicio de la protesta se realice sin detenciones.
En la ruta, la organización Convención Plurinacional de la Regiones del Perú (Conalrep), reclamó el agua como derecho, mientras que la Confederación Nacional Agraria (CNA) defendió los recursos genéticos y la seguridad alimentaria. Estudiantes de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos secundaron el lema “Sin bosque no hay agua, sin agua no hay vida”.
A dos cuadras de la Plaza Bolívar, donde está el Congreso, la Policía Nacional les cerró el paso y armó un cordón para que la marcha salga de la pista y prosiga por la vereda. Así llegaron al frontis del Legislativo, donde una baranda metálica aseguró su permanencia en dicho espacio.
Sin embargo, los gritos de los manifestantes se hicieron más fuertes contra el gobierno y los congresistas: “Dina asesina, el pueblo te repudia”, “Dina y el Congreso, la misma porquería”, “Fuera, fuera, fuera, ratas del Congreso”, vocearon.