El estado de Texas, conocido por sus amplias carreteras, se encuentra en el centro de un importante cambio legislativo que podría afectar directamente a los conductores en los próximos años. Con la fecha de implementación prevista para el año 2025, los detalles de la propuesta han comenzado a captar la atención de autoridades y ciudadanos por igual.
Este proyecto de ley texano llega en un momento crítico, cuando los accidentes viales por distracciones siguen siendo una de las principales causas de muertes y lesiones en las carreteras de Texas. Con el respaldo de varios sectores preocupados por la seguridad vial, la nueva legislación propone un cambio significativo en las sanciones, lo que podría llevar a los conductores a reconsiderar su comportamiento al volante.
La propuesta, presentada el 15 de noviembre de 2024, busca aumentar las multas para los conductores de Texas que utilicen su teléfono móvil mientras están al volante.
Esta medida se implementaría en un intento por reducir las distracciones y mejorar la seguridad vial en el estado. La ley, conocida como HB 1357, tiene como objetivo disminuir los accidentes y las muertes relacionadas con el uso del celular mientras se conduce, un problema creciente en las carreteras estadounidenses.
Según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA), más de 3.000 muertes anuales en el país son atribuibles a conductores que utilizan su celular mientras manejan. Este tipo de distracción se ha convertido en un desafío importante para las autoridades, que buscan formas más efectivas de reducir estos incidentes.
La licencia de conducir en Texas ha sufrido distintas modificaciones con la implementación del Real ID. Foto: composición LR.
El proyecto HB 1357, que entraría en vigor en septiembre de 2025 si se aprueba, busca abordar esta problemática directamente al aumentar las sanciones. La ley no solo afectaría a los conductores que envíen mensajes de texto o hagan llamadas, sino también a aquellos que interactúan con aplicaciones o utilizan sus teléfonos para navegar mientras conducen.
Las multas por distracciones al volante podrían aumentar de 25-99 dólares a entre 100 y 200 dólares, dependiendo de la gravedad de la infracción y si es reincidente.
El impacto económico de la ley podría ser significativo tanto para los conductores como para las autoridades locales. Sin embargo, algunos críticos han señalado que esto podría generar una carga financiera adicional para los conductores, especialmente para aquellos que cometen infracciones de manera recurrente.
Este cambio en las sanciones también podría tener efectos más amplios sobre la percepción pública de la conducción responsable. Las autoridades de tráfico esperan que las nuevas multas disuadan a los conductores de usar sus teléfonos o realizar otras actividades distractoras mientras conducen.