Una prisión ubicada en el continente de América es considerada la más segura del mundo. Este recinto penitenciario es conocido popularmente como la 'Alcatraz de las Montañas Rocosas'. Actualmente, representa una de las penitenciarías más confiables del mundo moderno. Asimismo, su fama no solo proviene de su estricto régimen, sino también de los prisioneros de renombre que han pasado por sus celdas, como el narcotraficante Joaquín ‘Chapo’ Guzmán.
Por otra parte, esta prisión no solo impone medidas extremas de seguridad, sino que también cuenta una estrategia de aislamiento que previene cualquier forma de comunicación entre los reclusos y el mundo exterior. A lo largo de los años, esta prisión ha perfeccionado sus métodos para asegurar que aquellos que entran bajo la categoría de 'máximo riesgo' permanezcan bajo vigilancia constante, eliminando —casi por completo— cualquier posibilidad de fuga.
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La prisión de máxima seguridad ADX Florence, ubicada en Estados Unidos, es considerada el centro penitenciario más seguro del mundo. Inaugurada en 1994, fue diseñada específicamente para albergar a criminales considerados potencialmente peligrosos para la sociedad y para otros reclusos. La estructura de la prisión está conformada por un conjunto de medidas de seguridad que incluyen puertas de control remoto, cámaras de vigilancia avanzadas y patrullas armadas las 24 horas del día.
Así luce ADX Florence, la prisión más segura del mundo. Foto: Micoope
Las razones de su reputación como la prisión más segura del mundo son varias. En primer lugar, la localización de ADX Florence es en sí misma un elemento disuasorio, ubicada en una zona aislada donde las condiciones climáticas extremas complementan las barreras físicas de la prisión. Además, cada celda está equipada con paredes reforzadas y pequeñas ventanas que impiden la visión más allá de los cielos. Los internos pasan aproximadamente 23 horas del día en solitario y reciben sus comidas a través de pequeñas compuertas en las puertas de las celdas.
El Chapo Guzmán se encuentra en ADX Florence desde el 2019. Foto: NZ Herald
Estados Unidos cuenta varias prisiones de renombre por su rigor y medidas de seguridad. Alcatraz, aunque ya no en funcionamiento como prisión, sigue siendo un ícono en la historia penitenciaria de América por su ubicación en una isla y su historial de reclusos famosos. Otra es la Prisión Estatal de San Quentin en California, conocida por albergar el corredor de la muerte del estado y por sus diversos programas de rehabilitación, que contrastan con el régimen de ADX Florence. Estas instituciones forman parte de un complejo sistema carcelario destinado a contener y rehabilitar, en diferentes medidas, a quienes han transgredido las leyes del país.
Alcatraz es una de las penitenciarías más populares de Estados Unidos. Foto: Pixabay
Además, estas prisiones, emblemáticas en la estructura de seguridad estadounidense, no solo demuestran la diversidad en el manejo penitenciario, sino también la evolución de las políticas de encarcelamiento en uno de los países con la mayor tasa de prisioneros por habitante en el mundo. En ese sentido, ADX Florence destaca como el máximo ejemplo de aislamiento y seguridad, un testimonio sombrío de la extrema respuesta penal en la lucha contra el crimen en el siglo XXI.