Exministro de Economía. Doctor en Administración y Dirección de Empresas de la Universidad Ramón Llull-Esade, España, Magíster en Economía de la Pontificia Universidad Católica del Perú, exbecario Escola de Posgraduacao Economía de la Universidad de Sao Paulo, Brasil. Economista de la UNMSM, Perú. Investigador Concytec-Renacyt.
El sábado 21 de septiembre el Poder Ejecutivo promulgó en tiempo récord la Ley 32445, cuyo asunto de interés principal fue la autorización para que los afiliados puedan, por octava vez, retirar hasta 4 UITs, esto es S/ 21,400 de sus ahorros previsionales. También se eliminó la obligatoriedad de aportes para los trabajadores independientes y se restableció la opción para que los aportantes puedan retirar el 95.5 % del total de sus fondos al momento de alcanzar la edad de jubilación.
Digo que esto se hizo en tiempo récord porque la autógrafa de la norma fue aprobada por el Congreso en la noche del miércoles 17 y remitida luego al Poder Ejecutivo para su promulgación.
Si las consideraciones financieras para los opositores a la octava autorización no cambiaron, ¿a qué responde el cambio de opinión? Acomodo político, que le dicen. Al final no es plata del Estado, sino de los afiliados a una AFP. Cabe señalar, además, que la presidenta Boluarte ya había señalado que no observaría la norma y podría promulgarla pronto, a pesar de tener hasta 15 días hábiles para hacerlo. Promulgada la ley y publicada en el diario oficial El Peruano, entrará en vigencia al día siguiente. A partir de ese momento, la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) deberá emitir el reglamento operativo, que incluirá el cronograma oficial de solicitudes y desembolsos que autoriza el retiro parcial.
La norma también incluye una precisión para que no se considere como liberación de fondos a los que se refieren ciertos artículos de la Ley de Modernización Previsional ya vigente, que los restringían. Los afiliados que retiren de sus ahorros en la AFP, así se queden con S/ 0 en sus cuentas, tendrían posibilidad de pedir los S/ 600 mensuales como pensión mínima.
Voces críticas las hay. Algunos refieren que el retiro de fondos está “matando” la esencia de un sistema de jubilación y generando un problema social a futuro. Además, se advierte que, al agotar sus ahorros previsionales, muchas personas se verán forzadas a extender su vida laboral de manera considerable.
Salgamos un poco de la mirada financiera y veamos el tema de los retiros parciales desde el plano económico. ¿Qué sucede cuando un trabajador pierde su empleo y cómo es y cuánto dura el tránsito para encontrar un nuevo trabajo si, además, ya se gastó su CTS? Algo muy real a la fecha. ¿O no? Alternativamente, si quisiera mejorar en algo los servicios de salud y/o educación a los que accede su familia, ¿qué, se espere hasta que se jubile? Seamos realistas: salarios bajos generan pensiones bajas. Las AFPs no son la panacea.
Se menciona también que va a tenerse que generar después algún incentivo para que gente mayor que ha utilizado recursos de jubilación pueda trabajar más fácilmente en el futuro, y va a tener que hacerlo de repente hasta los 70 y tantos años. Lo que hoy ocurre en nuestro país es que la gente que cumple 65 años, en lo formal, se jubila solo para acceder al 95.5 % de su ahorro previsional, pero en lo real sigue trabajando fuera de planilla. ¿O no?
Cualitativamente, y regresando a las finanzas, coincido en que hay impactos negativos sobre el financiamiento de bonos de largo plazo tanto públicos como privados, debido a que las AFP, que eran los principales compradores, han reducido –no eliminado– la capacidad de compra.
Con el octavo retiro de los afiliados en las AFP, ¿cuál es el costo de oportunidad de los efectos financieros adversos de haber sido evitados? Seamos claros: este retiro no elimina la capacidad de invertir a largo plazo de las AFP, mas sí podría reducirse en un escenario extremo.
No exageremos. Estamos frente a un retiro parcial, no total, del ahorro previsional.

Exministro de Economía. Doctor en Administración y Dirección de Empresas de la Universidad Ramón Llull-Esade, España, Magíster en Economía de la Pontificia Universidad Católica del Perú, exbecario Escola de Posgraduacao Economía de la Universidad de Sao Paulo, Brasil. Economista de la UNMSM, Perú. Investigador Concytec-Renacyt.