Profesora e investigadora del Departamento Académico de Ciencias de la Gestión (DACG), Pontificia Universidad Católica del Perú.

¿El octavo retiro de AFP solucionará la inseguridad alimentaria en el Perú?, por Angie Higuchi

“Este nuevo retiro no justifica las motivaciones de satisfacción de necesidades inmediatas de dinero en tiempos de crisis”

Profesora e investigadora del Departamento Académico de Ciencias de la Gestión (DACG), de la Pontificia Universidad Católica del Perú

En el Perú 1 de cada 3 peruanos es pobre (Dr. José Rodríguez, PUCP, 2024). El INEI publicó que la pobreza monetaria alcanzó al 27.6% de la población del país en el 2025. Esto significa que un tercio de la población peruana no puede cubrir una canasta básica de consumo. Esto se ve respaldado por FAO (2024) que afirmó que el 51.7% de la población peruana enfrenta situaciones de inseguridad alimentaria moderada o severa. Asimismo, el informe del MIDIS y PMA (2024) aseguran que el 51,6% de los hogares enfrentan algún grado de inseguridad alimentaria.

Finalmente, los resultados del IEP apoyaron estas alarmantes cifras, argumentando que casi uno de cada dos se ha quedado sin alimentos por falta de recursos en el Perú rural. En el nivel socioeconómico D/E, seis de cada 10 habían reducido su consumo de alimentos. Otros datos necesarios para entender esta situación: el 43.1% de los niños de menos de 3 años son anémicos (dos puntos más que en el 2019) y la tasa de desnutrición infantil en los niños menores de 5 años de edad se mantiene en alrededor del 11.5%, alcanzando el 20.3% en las áreas rurales. Por otro lado, el porcentaje de obesos en todo el país aumentó, afectando al 24.1 de la población mayor de 15 años (1.8% más que el 2019), lo cual incrementó también los riesgos de enfermedades crónicas no transmisibles (INEI, 2024).

A propósito del debate de la comisión de economía sobre el octavo retiro, según estadísticas de la SBS, al 31 de diciembre de 2024 se han hecho 7 retiros de las AFP. Esto ha dado como resultado que el 72% de los afiliados (alrededor de 7.1 millones de afiliados) han retirado sus fondos, cuya suma alcanza un total de S/ 115.2 mil millones. Dicho monto retirado representó el 10.6% del Producto Bruto Interno (PBI) del Perú en el 2024.

Según la misma SBS, estos retiros han traído como consecuencia que el 23% del total de afiliados activos no cuenten con recursos en su fondo de pensiones. Para este grupo, el panorama previsional resulta preocupante porque ya no cuentan con un ahorro jubilatorio, generando una potencial situación de vulnerabilidad económica en su vejez y caer en situación de pobreza. Esto al mediano y largo plazo incidiría en un incremento en los niveles de pobreza y pobreza extrema a nivel nacional.

La pregunta que nos interesa aquí es si ¿este octavo retiro solucionará la inseguridad alimentaria en los más vulnerables? La respuesta es un rotundo no. Vamos a sustentarnos en argumentos evidenciados por la misma SBS. Primer argumento: la SBS calcula una potencial salida del ahorro jubilatorio de alrededor de S/ 26,320 millones, los cuales serían realizados por 7.5 millones de afiliados (ver Tabla N° 1). Este monto sería adicional a lo que ya se ha retirado por las normas que permitieron los retiros extraordinarios de los fondos del SPP entre los años 2020 y 2024. Segundo argumento: aproximadamente 10 mil millones y medio sería retirado por jóvenes menores de 40 años quienes ven con lejanía la jubilación (ver Tabla 1).

Rango de edad Retiro de No. Afiliados Monto retiros (en Mill. S/.)
< a 20 años 92,497 3,700
20-29 1,952,661 1,844
30-39 2,153,093 4,997
40->=60 3,320,204 15,779
Total 7,518,455 26,320

Fuente: SBS, 2025

Tercer argumento: la SBS ha calculado que teniendo en cuenta la distribución por quintiles de ingresos, el 63% (S/ 16.61 mil millones) sería retirado por afiliados que se encuentran ubicados en los dos quintiles superiores de ingresos. En consecuencia, esta propuesta legislativa, estaría direccionada a quienes perciben altos ingresos. Los de clase A y B son aquellos quienes hasta el momento se encuentran trabajando continuamente y por ende no se encuentran en una situación económica crítica.

Basándonos en estos tres argumentos, podemos concluir que un nuevo retiro no justifica las motivaciones de satisfacción de necesidades inmediatas de dinero en tiempos de crisis. Muchos menos en atacar la inseguridad alimentaria de los más vulnerables.

La misma SBS sugiere de una mayor reflexión por parte del gobierno sobre el impacto de este octavo retiro que no solo puede tener en el sistema previsional, sino en las finanzas del Estado y también en la sociedad. Una cita destacada, mencionada acertadamente por el reconocido economista Jorge González Izquierdo con respecto a este octavo retiro de AFP (atribuida a Winston Churchill, aunque posiblemente errónea o apócrifa), dice que: «La diferencia entre un político y un estadista es que el político piensa en las próximas elecciones, mientras que el estadista piensa en la próxima generación». ¿Es el gobierno peruano político o estadista? Saquen sus propias conclusiones.