Asia

Pierde ahorros de toda su vida tras ser estafada por hombre que fingió ser un artista K-pop

El joven resultó ser un farsante y, tras perder más de 14 mil dólares, descubrió que ni siquiera era coreano.

El sujeto se hizo pasar por un idol surcoreano. Foto: Allkpop
El sujeto se hizo pasar por un idol surcoreano. Foto: Allkpop

Un ama de casa japonesa de 44 años perdió todo el dinero que había ahorrado a lo largo de toda su vida luego de que fuera engañada por un sujeto que se hizo pasar por un artista surcoreano de K-pop.

Según Allkpop, la madre de familia gastó su dinero en diversos encuentros con un “ídolo clandestino” que aparentaba ser una estrella de K-pop coreano.

Sin embargo, todo era una mentira. El joven resultó ser un farsante y, tras perder todo su dinero en esos encuentros, descubrió que ni siquiera era coreano, sino una persona japonesa que hablaba coreano con fluidez.

El 5 de marzo, el medio japonés Gendai Business reveló la historia de la ama de casa, quien gastó 2,5 millones de yenes japoneses (14.814 dólares) en el supuesto artista.

"En el momento en que descubrí la verdad, me sentí tonta. Gasté todos mis ahorros, pero tomaré esto como una lección", sostuvo la víctima al medio antes citado.

¿Cómo llegaron a concretarse esos encuentros?

En Japón, "ídolo clandestino" se refiere a artistas que son administrados de forma independiente y actúan en lugares pequeños mientras interactúan estrechamente con los fanáticos, de tal manera que los fanáticos pueden reunirse con los artistas por un promedio de 100 segundos, en los que pueden tomarse fotos, darse la mano y hablar durante ese tiempo.

"Comenzó cuando recibí un volante para una actuación. Estaba emocionada de ver las palabras: 'Ven a ver la actuación de un miembro que parece un ídolo coreano'", sostuvo la mujer, quien contó que fue durante la pandemia de la COVID-19 cuando conoció esta cultura clandestina y anheló interactuar de cerca con uno de los protagonistas.

Inclusive, compitió con otras mujeres para poder reunirse con el joven y gastó mucho dinero cada semana para tener citas con él durante seis meses.