Estados Unidos

Quién es Sarah McBride, la demócrata de Delaware que se convirtió en la primera congresista transgénero en EE.UU.

Las propuestas principales de Sarah McBride incluyen la expansión de la atención médica asequible, la defensa de los derechos reproductivos y el aumento del salario mínimo.

Sarah McBride también fue la primera mujer trans en ser elegida para el Senado estatal de Delaware en 2020. Foto: composición LR/difusión
Sarah McBride también fue la primera mujer trans en ser elegida para el Senado estatal de Delaware en 2020. Foto: composición LR/difusión

Sarah McBride ha hecho historia en Estados Unidos al convertirse en la primera congresista transgénero. Representante del estado de Delaware y miembro del Partido Demócrata, McBride ha desafiado las barreras sociales y políticas con una victoria que resuena a nivel nacional. El triunfo de McBride representa no solo un avance en la representación LGBTQ+ en el Congreso, sino también un hito que refuerza la diversidad y la inclusión en la política estadounidense. Su elección marca un cambio significativo en la percepción pública, donde las habilidades y propuestas han prevalecido sobre la identidad de género en el juicio de los votantes de Delaware.

Con una carrera política marcada por logros y un firme compromiso con los derechos sociales, McBride busca enfocarse en temas económicos, sociales y de salud a nivel nacional, tal como lo hizo en el Senado estatal de Delaware. Su trayectoria y sus declaraciones recientes reflejan una visión de unidad y progreso, y aunque la legisladora trans enfrenta desafíos, sus objetivos están centrados en mejorar las condiciones de vida de sus votantes y en avanzar en la igualdad de derechos en el país.

La elección de Sarah McBride llega en un momento en que Estados Unidos enfrenta una oleada de leyes y retórica anti-LGBTQ+. Foto: NBC

La elección de Sarah McBride llega en un momento en que Estados Unidos enfrenta una oleada de leyes y retórica anti-LGBTQ+. Foto: NBC

¿Quién es la primera congresista transgénero en Estados Unidos?

Sarah McBride, de 34 años, es una política demócrata con un historial que destaca por la representación y defensa de los derechos de la comunidad LGBTQ+. Antes de convertirse en la primera congresista transgénero en Estados Unidos, McBride fue la primera mujer trans en lograr diversas posiciones, entre ellas ser interna en la Casa Blanca en 2012 y hablar en la Convención Nacional Demócrata en 2016. Su carrera comenzó tras hacer pública su identidad trans durante su último año en American University.

McBride también fue la primera mujer trans en ser elegida para el Senado estatal de Delaware en 2020. Durante su tiempo como senadora estatal, se centró en temas de salud y apoyo familiar. Patrocinó leyes que crearon programas estatales de baja médica y familiar remunerada, además de ampliar el acceso al programa Medicaid. Su recorrido político y personal refleja una lucha constante por la equidad y la justicia.

La elección de Sarah McBride llega en un momento en que Estados Unidos enfrenta una oleada de leyes y retórica anti-LGBTQ+, especialmente dirigidas a la comunidad trans. Solo en este año, 16 estados han aprobado 45 leyes que limitan los derechos de las personas trans, principalmente en áreas de salud y educación. Además, el clima político se ha endurecido con figuras republicanas que promueven políticas que excluyen a las personas trans de actividades deportivas y restringen el acceso a servicios médicos.

Las propuestas de McBride y sus prioridades en el Congreso

Como congresista, Sarah McBride ha dejado claro que sus prioridades van más allá de su identidad de género. Sus propuestas principales incluyen la expansión de la atención médica asequible, la defensa de los derechos reproductivos y el aumento del salario mínimo, con el objetivo de mejorar la vida de sus votantes a nivel nacional. Durante su mandato en el Senado de Delaware, destacó por su enfoque en políticas de salud y bienestar, aspectos que también quiere llevar al Congreso.

Entre sus objetivos se encuentran mejorar el acceso a la atención dental para personas de bajos recursos y continuar con la lucha por los derechos laborales y de salud. McBride espera que, al igual que en Delaware, su trabajo sea evaluado por su capacidad de hacer la diferencia en las vidas de sus votantes y no solo por su identidad como mujer trans.