Domingo

Eva Ayllón: "Tengo 67 años y acabo de nacer"

"Este concierto está hecho solo para agradecer el amor de mi gente durante 50 años. Es increíble, yo misma no puedo creer que esté cumpliendo 50 años. ¡No lo puedo creer!”.

"¿Qué me falta hacer? Me falta cantar más, me faltan más escenarios, no pierdo la ilusión, me siento como una primeriza". Foto: Evelyn Merino Reyna
"¿Qué me falta hacer? Me falta cantar más, me faltan más escenarios, no pierdo la ilusión, me siento como una primeriza". Foto: Evelyn Merino Reyna

Había una vez una joven en la quinta San José, en Lince, que muchas veces se iba al colegio sin desayunar y le daba duro a los zapatos hasta casi hacerlos reventar, que sufrió el embarazo adolescente y aprendió a enfrentar la vida de la mano de su abuelita Eva, quien la animaba a cantar en el colegio, pero que no llegó a verla recibir ovaciones en los escenarios.

María Angélica Ayllón se llama la joven de Lince. Simplemente Eva Ayllón. Porque fue adoptando el nombre de su inolvidable abuela, mientras recorría el frenético mundo de las peñas, de los escenarios musicales con Los Kipus y como solista. Y también vivió intensamente los más de 30 discos grabados, hasta obtener el Grammy a la excelencia y cantar con los mejores músicos en distintos rincones del mundo.

Y con el nombre de la abuelita amada se hizo ritmo, color y sabor. Y se hizo un grito, ¡que viva el Perú, señores!, que siempre repite en sus presentaciones. Y pide aplausos para el país con sus landós, festejos, marineras y valses criollos. Cumple 50 años de trayectoria artística y lo celebrará con “Enamorada de estar aquí”, concierto programado para el sábado 15 de julio en el estadio de San Marcos. Reunirá a decenas de músicos, bailarines, invitados especiales, al director y productor de teatro Juan Carlos Fisher, al músico Allan Phillips, al productor Juan Morillo.

“Estoy muy contenta de lo que estoy consiguiendo y este concierto está hecho solo para agradecer el amor de mi gente durante 50 años. Es increíble, yo misma no lo puedo creer que esté cumpliendo 50 años. ¡No lo puedo creer!”.

Son 50 años y por eso merece festejarse a lo grande

Así es, a lo grande. Este concierto lo iba a presentar antes de la pandemia, y resulta que no se pudo hacer, pero como los tiempos de Dios son perfectos, se va a realizar –bueno, espero que se realice– este año. Y ya, estoy muy bien asesorada espiritualmente.

En estos 50 años seguramente hay un espacio preferencial para la abuelita Eva

Sí, sí, sí... mi abuelita es mi mundo, ella es la primera en el homenaje definitivamente porque es la que me crió, la que me impulsó, la que hizo todo para que yo estuviera en los escenarios. Lamentablemente, no me no me vio llegar a ellos, pero la tengo en mi corazón. En cada show que tengo ella está conmigo.

Fue muy dura la etapa de los inicios, Eva, hay pobreza y episodios muy dolorosos. ¿La música fue un alivio para todo eso? ¿Sin ella no hubieras superado esos momentos?

Yo creo que sí, sí... La música me ayudó mucho a resolver mis problemas, a resolver mis tristezas, me ayudó mucho en verdad. Pero te digo, cuando llegué a la música no imaginé este resultado. De ninguna manera lo imaginé. Yo no empecé diciendo voy a triunfar, quiero ser un artista de fama, no. Yo solo quería cantar. Y de pronto me encuentro con una popularidad maravillosa y una carrera de muchos éxitos, de muchas cosas lindas. Y aquí me tienes luchando aún, tratando de aprender muchas cosas que se aprenden para el escenario.

Le digo a Eva Ayllón que ese primer disco suyo como solista, “Esta noche... Eva Ayllón” (1979) es una verdadera joya, con temas como Idolatría, Cardo o ceniza, Desdén... Y me brinda un anuncio. “Te cuento que estoy regrabando toda mi producción, la estoy remasterizando. Quiero refrescar mi música para que los jóvenes la puedan oír y sepan de lo que se trata, porque muchos no conocen mi música... bueno, soy un dinosaurio del siglo pasado... no la recuerdan, no la conocen”.

Esa primera obra ya está en Spotify, como muchas otras de su colección. Eva le tiene mucho corazón a ese disco solista, aunque también a los otros, todos tienen su historia, sus cuentos mágicos, el espíritu de la cantante va dentro de ellos. “Son muy especiales, como los hijos”, nos revela quien se califica a sí misma como ‘dinosaurio del siglo pasado’, pero que en realidad perteneció a la época de legendarios cantantes y compositores de la música peruana, cuando reinaban las peñas, los centros musicales. Y se oía a Lucha Reyes, Chabuca Granda, Oscar Avilés, Alicia Maguiña.

“Tenemos que volver a poner peñas para que así puedan lucirse las voces maravillosas de nuestro Perú. Tenemos que experimentar nuevamente esa época tan linda. Si yo encontrara un loco con dinero, pondría una peña, te lo juro”.

Has grabado más de 30 discos, has ganado premios internacionales como los Grammys, has tocado con los mejores músicos del mundo. ¿Qué te falta por hacer?

Me falta cantar más. Me faltan más escenarios. Y no pierdo la ilusión, sigo así, como primeriza, así como cuando entro al escenario y me pongo a temblar antes de ponerme a cantar. Pues así, yo conservo esa ilusión. A mí me falta cantar más. Llevar mi música a más sitios todavía. Tengo esta esa fe de que lo voy a lograr.

¿Tienes fuerza, energía, para eso?

Por supuesto, por supuesto que sí, imagínate, 67 años tengo... y acabo de nacer.

¿Cambiarías algo de tu trayectoria desde que cantaste con Los Quipus? Dirías ¿esto lo hubiese hecho mejor?

Sí, sí, lo pienso. Lamentablemente no te lo puedo decir, pero, sí, lo pienso. Ha habido épocas en que he perdido mucho el tiempo, pero Dios sabe lo que hace, Dios lo sabe.

 "Las redes sociales son una maravilla. Pero ya aprendí que cuando no te quieren, no te quieren, pues. Y hay mucha gente NN que no sabe de lo que habla. Por eso mismo no hay que hacer mucho caso a lo que allí se dice...”. Foto: Evelyn Merino Reyna

"Las redes sociales son una maravilla. Pero ya aprendí que cuando no te quieren, no te quieren, pues. Y hay mucha gente NN que no sabe de lo que habla. Por eso mismo no hay que hacer mucho caso a lo que allí se dice...”. Foto: Evelyn Merino Reyna

Te hubiera gustado ser mucho más compositora

Tengo ahí unas cositas que han salido, que hemos hecho. Nos hemos ganado dos gaviotas y pienso ganarme más si Dios lo permite. Mujer de temple, mujer guerrera, todavía recordamos cuando en el Festival de Viña del Mar en 2001 el público la pifió duramente por esa predisposición de ir contra lo peruano. Eva Ayllón no se amilanó. Siguió con su show hasta agradar. La misma prensa sureña destacó su voz y talento. Guerrera y trabajadora tenaz.

Allí están para demostrar su lucha incesante, con arte, con alegría, sus decenas de discos como Ritmo, color y sabor; Kimba Fá; Landó de la vida y yo; Sencillamente Eva; Clavo & canela; Eva canta a Chabuca Granda; Con Intillimani; Live from Hollywood. Y están sus trabajos con Marc Anthony, Armando Manzanero, El Gran Combo, Raphael, Diego el Cigala, Kalimba, Mercedes Sosa, Olga Tañón, David Bisbal, Los Kjarkas, Gilberto Santa Rosa, Álex Lora, Luis Enrique, Jerry Rivera, Albita Rodríguez.

Y están sus conciertos, unas puestas en escena con muchísimos profesionales. Quien haya asistido a ellos no puede dejar de admirar a sus músicos, a sus elencos de baile, a sus invitados, y por supuesto a su canto, que se hizo conocido desde los años 70, con Mal paso, Nada soy, Cariñito, Que somos amantes, con Los Kipus.

Por eso ya tiene registrado su nombre en nuestro archivo cultural. Puede caer simpática o no, puede generar devoción o no, pero ella ya ha marcado con varios discos memorables, con varios títulos, la música popular del Perú.

¿Qué opinas de las redes sociales? ¿Consideras que han sido muy injustas contigo?

Bueno, las redes sociales son una maravilla. Me hubiera encantado tenerlas en mi época, pero no fue así. Ya aprendí que cuando no te quieren, no te quieren, pues. Y hay mucha gente NN que no sabe de lo que habla. Por eso no hay que hacer mucho caso… Por las redes tienes que informarte y divertirte porque si no te causa diversión es mejor que no lo hagas.

Hay gente que te adora y hay quien dice que te falta humildad y, como dice la canción, que eres ‘negra presuntuosa’

Ja, ja, ja, todas las mujeres somos presuntuosas y pretenciosas... Mira, el hecho de que yo a veces no pueda comunicarme bien con la gente es de repente por la forma en que me están pidiendo algo. Pero después nadie se queja, me tomo fotos, converso con la gente, las abrazo, las beso... no sé qué más se puede hacer.

Sí te sientes querida en el Perú.

Me siento querida, valorada, me siento una triunfadora en mi tierra. Es lo más importante. Más de tres horas de música, baile y alegría, ofrece en el concierto por los 50 años. El 15 de julio en San Marcos. Con harto repertorio criollo y ritmo afroperuano. “Pon por favor que las entradas están a la venta en Ticketmaster”. Y se despide con la palabra que más repite: “gracias”. A la vida, a Dios, a sus padres, a su abuela, al público “por haberme tenido siempre con ellos”. Por todo eso dice ser muy pero muy feliz.