Golpe directo a Biden: Trump promete eliminar polémica ley que califica como racista e ilegal en EEUU
Donald Trump anunció la anulación de esta polémica ley, una iniciativa del gobierno de Joe Biden destinada a reducir la brecha tecnológica en Estados Unidos.

En un nuevo episodio de conflicto político, Donald Trump, el mandatario de Estados Unidos, declaró que su gobierno suprimirá la Ley de Equidad Digital, una normativa esencial del gobierno de Joe Biden para reducir la brecha tecnológica. El presidente calificó la ley como "racista e ilegal" y garantizó que ya implementó acciones para su anulación inmediata.
Mediante su plataforma Truth Social, Trump atacó el programa que invirtió miles de millones de dólares en potenciar el acceso a la red en comunidades desfavorecidas. “¡Se acabaron las limosnas basadas en la raza!”, escribió. Esta afirmación establece una posición sólida frente a las políticas de equidad digital impulsadas por los demócratas desde 2021.
¿Cuál es la razón por la que Trump quiere eliminar esta polémica ley de Biden?
El líder republicano argumenta que la Ley de Equidad Digital simboliza una utilización incorrecta de los recursos públicos y una infracción a los principios constitucionales de Estados Unidos. Según su criterio, el programa otorga una prioridad injusta a ciertos grupos raciales y socioeconómicos, lo que, de acuerdo con él, va en contra del principio de igualdad ante la ley.
Trump sostuvo que su anuncio se decidió después de dialogar con su secretario de Comercio, Howard Lutnick, quien determinó que la ley debía ser anulada inmediatamente. El mandatario añadió que su eliminación no solo preservaría lo que se considera una política de sesgo, sino que también "ahorraría a los contribuyentes billones de dólares".
¿De que trata esta ley que fue promulgada en el mandato de Biden?
Durante el mandato de Joe Biden, se promovió la Ley de Equidad Digital como un componente del paquete de infraestructura bipartidista aprobado en 2021. Su meta principal consistía en asegurar el acceso universal a internet de alta velocidad, particularmente en áreas rurales, grupos de bajos recursos y comunidades históricamente marginadas.
La legislación, con una inversión superior a US$2,700 millones, respaldaba iniciativas de conectividad, formación tecnológica y programas de educación. Para la administración de Biden, este proyecto representaba un avance crucial para reducir la brecha digital y asegurar que todos los ciudadanos de Estados Unidos puedan competir en condiciones equitativas en la era digital.