"Te Fare", obra que retrata la visión paradisíaca del primer viaje del artista a Tahití, fue la estrella de una subasta en la que también se remataron pinturas de Picasso, Magritte, Mattisse y Renoir. ,"Te Fare (La maison)" (1982), pintura de Paul Gauguin en la que plasmó su visión paradisíaca de su primer viaje a Tahití, alcanzó en una subasta en Londres la cifra de 23, 8 milles de euros. El óleo de Gauguin fue la estrella de una sesión en la casa Christie's en la que también se remató el óleo del surrealista belga René Magritte (1898-1967) "La corde sensible" (1960) por 17,87 millones de euros. PUEDES VER: Galería Pancho Fierro presenta grabados de Picasso El paisaje de Gauguin es uno de los más coloridos que el francés ejecutó durante su etapa de fascinación por Tahití, y está dominado por una amplia gama de verdes, suaves morados y azules profundos. "Liberados de una función únicamente descriptiva, sus colores no solo conjuran un profundo sentido del exotismo, sino que evocan asimismo la intensidad del calor, la intensa luz y la humedad envolvente de esa tierra tropical", describió la casa de subastas. "Estoy imbuido en el trabajo, ahora que he logrado conocer el terreno y sus olores, y a los tahitianos, a quienes dibujo de un modo enigmático", le relató el propio Gauguin a su esposa Mette en una carta escrita en la primavera de 1892, la misma época en la que pintó "Te Fare". Lo obra de Magritte "La corde sensible", por su parte, es un óleo de gran formato que el pintor regaló originalmente a su mujer, Georgette, pero que finalmente el matrimonio vendió a una marchante de arte y terminó en manos de la familia del joyero Harry Winston. Como en gran parte de su obra, el belga experimenta en ese trabajo con objetos cotidianos ubicados en escenarios inesperados, con el objetivo de crear sensaciones singulares en el espectador. En la etapa final de su carrera, Magritte había decidido plasmar en sus lienzos tan solo aquellas ideas que le resultaran especialmente innovadoras. "Pronto voy a empezar a pintar menos. Las nuevas obras que produciré me van a llevar más tiempo. He llegado a un punto en el que cada cuadro presenta ante mí un nuevo problema, y no quiero dedicarme a cosas demasiado fáciles. Creo que hay ya muchas pinturas en el mundo", reflexionaba Magritte en una carta al galerista Alexander Iolas en 1959. En la misma subasta, el óleo del belga "Le domain d'Arnheim" (1938) alcanzó los 10,24 millones de libras (11,86 millones de euros). Entre las obras surrealistas e impresionistas subastadas en Londres, destacó asimismo "Jeune fille aux anémones sur fond violet" (1944), parte de una serie de escenas interiores creada por el francés Henri Matisse, que alcanzó un precio de 8,45 millones de libras (9,88 millones de euros). "Joueur de flûte et femme nue" (1970), un monumental retrato de dos figuras firmado por el español Pablo Picasso, se remató por 4,64 millones de libras (5,42 millones de euros). "Canotage à Bougival" (1881), de Pierre-Auguste Renoir, se vendió por 4,19 millones de libras (4,9 millones de euros), mientras que "Kauernder weiblicher Akt mit blonden" (1914), de Egon Schiele, subió en la subasta hasta 2,96 millones de libras (3,46 millones de euros).