Osado buceador ingresa a arrecife repleto de cocodrilos y nada junto a ellos mientras graba todo [VIDEO]
Vía YouTube. El buceador italiano Bartolomeo Bove sorprendió a miles luego de poner en peligro su vida mientras nadaba con decenas de estos peligrosos reptiles.
- Zully se defiende tras ser criticada por organizar chocolatada navideña el 24 de diciembre: "No estoy acostumbrada a celebrar Navidad"
- Tiktoker realiza sorteo gratuito de pavo en bus de Lima y desata risas: "Me pasé más de 10 paraderos y no gané"
En YouTube, y otras redes sociales, se ha hecho viral la peligrosa experiencia que vivió Bartolomeo Bove, un buceador que se sumergió a un arrecife infestado de peligrosos cocodrilos, con el objetivo de grabarlos desde muy cerca. Miles de usuarios quedaron atónitos tras conocer la osada aventura del joven.
Los cocodrilos son considerados como una de las especies más peligrosas, por lo que se recomienda mantener una distancia prudente cada vez que alguien se encuentra cerca a su hábitat. Sin embargo, este hombre decidió no seguir esas normas y fue a encontrarse cara a cara con estos animales.
PUEDES VER: Joven construye ‘silla de ruedas todoterreno’ para que su pareja pueda recorrer cualquier lugar [VIDEO]
Bove publicó un clip de su hazaña en su cuenta de YouTube e Instagram, donde además detalló que todo el hecho fue grabado en las aguas del Banco Chinchorro, situado frente a las costas del estado de Quintana Roo, México. También explicó que en ese lugar habitan más de 500 cocodrilos, los cuales residen exactamente en la laguna de la isla central del atolón y a veces nadan en mar abierto.
En el video se puede ver a Bartolomeo Bove desplazándose muy cerca a uno de estos reptiles. Él, inmediatamente, le acerca la cámara al hocico y comienza a grabarlo muy de cerca. Logra capturar sus dientes y el interior de su boca.
Luego de notar que el animal se estaba yendo del lugar, decidió seguirlo, mientras captaba todos sus movimientos a escasos centímetros. El joven continuó grabando al cocodrilo en todo su esplendor y este, sorprendentemente, no lo atacó.
