El multimillonario que pagó $ 1 millón por un estacionamiento
El espacio para aparcar su vehículo se encuentra dentro del quinto rascacielos más alto de Hong Kong.
- La ruta de las armas de EE.UU. a Haití que alimenta a las bandas criminales y goza del silencio de Donald Trump
- Estados Unidos renueva alerta e insta a sus compatriotas a abandonar "inmediatamente Venezuela"
La economía de Hong Kong sufre una ralentización desde hace cinco meses, debido a la crisis política, pero ello no impidió a una persona pagar cerca de un millón de dólares por una plaza de parking.
Esta enorme suma, pagada al hombre de negocios Johnny Cheung Shun-yee por un comprador anónimo, refleja las profundas desigualdades de la sociedad hongkonesa, donde uno de cada cinco habitantes vive bajo el umbral de la pobreza, lo que también ha avivado las tensiones entre los manifestantes que se movilizan desde junio.
TE RECOMENDAMOS
MÁS PERUANOS CONTRA FUJIMORI: LO QUE SE LE VIENE A KEIKO | LA VERDAD A FONDO CON PEDRO SALINAS
El empresario ganó alrededor de 900 millones de dólares de Hong Kong el año pasado en aproximadamente nueve meses, con la compra y venta de pisos en un edificio de oficinas.
Esta plaza de estacionamiento, de 7,6 millones de dólares de Hong Kong (USD 970.000), representa 30 veces el salario medio anual en Hong Kong.
La plaza de parking está ubicada en The Centre, el quinto rascacielos más alto de la ciudad, que copó titulares hace dos años al ser vendido por la suma récord de más de 4.500 millones de euros (USD 5.000 millones), convirtiéndose en el edificio de oficinas más caro del mundo.
PUEDES VER Liberan al joven que mató a su novia embarazada cuyo caso originó las protestas en Hong Kong
“Muchos de esos propietarios en The Center están en finanzas o en otros negocios de alto crecimiento”, dijo Stanley Poon, director gerente de Centaline Commercial. “Para estos magnates, no es una compra significativa, si se compara con el valor de los pisos de oficinas que poseen”.
Hong Kong, excolonia británica devuelta a China en 1997, vive desde junio manifestaciones y acciones casi cotidianas de un movimiento de protesta que denuncia un retroceso de libertades, pero también una injerencia creciente de Pekín en los asuntos de su región semiautónoma.
