Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, ha planteado un "nuevo comienzo" en las relaciones con Estados Unidos, dirigiéndose al presidente electo, Donald Trump. En un mensaje transmitido por la televisora estatal VTV, Maduro expresó su deseo de que esta nueva etapa beneficie tanto a Venezuela como a América Latina, en un contexto marcado por tensiones históricas.
Durante su intervención, el mandatario recordó que la administración de Trump entre 2017 y 2021 no fue favorable para su país. Sin embargo, se mostró optimista ante la posibilidad de un cambio en la dinámica de las relaciones, enfatizando la importancia de un enfoque de "ganar-ganar". Este planteamiento surge en medio de cuestionamientos internacionales sobre las elecciones venezolanas del 28 de julio.
El presidente de Venezuela recordó que el mandato de Trump (2017-2021) fue negativo y resaltó la importancia de un enfoque "ganar-ganar", en medio de cuestionamientos sobre las elecciones del 28 de julio. Foto: AFP
Las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos han estado caracterizadas por sanciones y desacuerdos. En agosto de 2017, se impusieron sanciones a Maduro tras la instalación de la Asamblea Constituyente, considerada ilegítima por Washington. Estas medidas incluyeron la congelación de bienes y la prohibición de transacciones con ciudadanos estadounidenses.
Maduro ha calificado estas acciones como una intervención en la soberanía de su país, argumentando que su gobierno ha sido objeto de persecuciones por parte de la administración estadounidense. A pesar de las sanciones, el presidente venezolano ha mantenido el apoyo de aliados como Cuba, Nicaragua, Bolivia y Rusia, quienes respaldan su legitimidad en el poder.
La oposición venezolana también ha reaccionado a la elección de Trump. Figuras como Edmundo González, quien se autodenomina "presidente electo de Venezuela", han felicitado al nuevo mandatario. González, junto a otros líderes opositores como María Corina Machado y Juan Guaidó, ha expresado su deseo de un cambio en la política estadounidense hacia Venezuela.
Este contexto de tensiones y reacciones diversas plantea un escenario complejo para las futuras relaciones entre ambos países. La comunidad internacional observa con atención cómo se desarrollarán estos vínculos en el nuevo mandato de Trump, especialmente en un momento en que la situación política y económica en Venezuela sigue siendo crítica.