OEA: 5 cancilleres vendrán a analizar crisis política

La Organización de Estados Americanos (OEA), como parte del proceso de activación de la Carta Democrática, enviará una Comisión de Alto Nivel conformada por cinco ministros en ejercicio, a analizar la crisis política atraviesa nuestro país.

Ayer, al mediodía (hora peruana), La República pudo conocer que el presidente del Consejo Permanente de la OEA, Marten Schalkwijk, anunció que entre los miembros de esta misión hay cinco cancilleres.

Se trata de Santiago Andrés Cafiero, de Argentina; Juan Carlos Holguín, de Ecuador; Eamon Courtenay, de Belice; Mario Adolfo Búcaro, de Guatemala y Julio César Arriola, de Paraguay. Ellos serán acompañados por los viceministros de Relaciones Exteriores, Laura Gil, de Colombia, y Christian Guillermet, de Costa Rica.

“La delegación propiciará un diálogo. Estarán en Lima y presentarán un informe luego de un diálogo entre las partes para avanzar hacia una estabilidad. Es la misión de más alto nivel en la historia de la aplicación de la Carta Democrática”, comentaron en Torre Tagle.

El representante de Perú en la OEA, Harold Forsyth, comentó que el hecho de que vengan cinco cancilleres a nuestro país a plantear salidas a la crisis significa que nuestro país tiene un peso importante en la región.

“Hay un obvio reconocimiento de que estamos atravesando momentos complicados. No somos la excepción en América Latina y en el mundo. Esto en ningún caso puede ser visto como un triunfo del Gobierno del Perú. Si hay un triunfador es el país, porque los peruanos y las instituciones tendrán la oportunidad de expresar libremente su opinión a este Grupo de Alto Nivel y estoy seguro de que las entrevistas de ellos abarcarán a todos los interesados”, manifestó a este diario.

Por el momento no hay una fecha exacta en la que esta misión llegará a Lima. En principio, trascendió que sería la próxima semana. Sin embargo, Harold Forsyth precisó que no sería así “porque tratándose de una delegación de Alto Nivel puede ser complicado cuadrar las agendas de los cancilleres”. Lo que es fijo es que arribarán antes de la quincena de noviembre.

La misión de la OEA conversará con representantes del Ejecutivo, Congreso y sociedad civil.

Este proceso, explicaron las mismas fuentes que adelantaron los nombres de los miembros de la delegación, pueda durar hasta un año. En la primera etapa, precisaron, la comisión elabora un informe que será derivado al Consejo Permanente de la OEA, luego esta instancia adoptará las medidas correspondientes para preservar el orden democrático.

La solicitud para activar la Carta Democrática fue realizada por el presidente Pedro Castillo, luego de que la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, presentó una denuncia constitucional en su contra por presunto delito de organización criminal y en vísperas de que la oposición del Congreso comience la recolección de firmas para una tercera moción de vacancia.

Hasta el momento, la Carta Democrática fue invocada hasta en 10 oportunidades en América Latina. La OEA evalúa soluciones y también sanciones, como la suspensión. El único país que llegó a ese extremo fue Honduras en 2009, tras el golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya. Dos años después este país fue reincorporado.

Las fuentes de Torre Tagle recalcaron que las recomendaciones de la OEA sí son vinculantes. “En todos sus artículos lo es, como garantía de la preservación de la democracia”, enfatizaron.

El caso peruano, apuntaron, puede ser un precedente relevante en la región.

Misión entre la derecha y la izquierda

Para el internacionalista Óscar Vidarte, la composición de esta Comisión de Alto Nivel, refleja diversidad de posturas.

“Cuando uno ve la conformación de este grupo uno encuentra a los cancilleres de Argentina y la viceministra de Colombia, pero por otro lado encuentra al de Ecuador, Guatemala o Paraguay que son de derecha, que no apoyan al régimen. Uno encuentra cierto balance”, analizó.

Vidarte alerta además de que el énfasis que pone la OEA en el caso peruano es porque nuestra democracia “se está hundiendo y la región lo asume como un reto”.