Mientras que en Lima predomina un ambiente de política alegre y mediocre, acompañado de delincuencia, corrupción y farándula (la sociedad del espectáculo), en otro lugar, denominado "el interior del Perú", el panorama es distinto. En muchas regiones, hay incendios forestales y el río Amazonas, junto con sus afluentes, presenta un marcado descenso en su caudal, lo que compromete gravemente la comunicación fluvial.
Desde hace dos meses y medio, el Perú está ardiendo. Los incendios forestales se extienden en Piura, Lambayeque, La Libertad, Cajamarca, Amazonas, San Martín, Ucayali, Áncash, Huánuco, Ayacucho, Apurímac, Huancavelica, Arequipa y Cuzco, siendo estas las regiones más afectadas. La población pide ayuda, que llega poca y tarde, en medio de la tristeza, el llanto y la desesperación.
La región de Loreto enfrenta otro problema que alarma tanto a pueblos rurales como urbanos, debido a los efectos del cambio climático y el calentamiento global. Lo veníamos advirtiendo: hay un aumento de la temperatura, ausencia de lluvias, y el río Amazonas y sus afluentes soportan una disminución en el volumen de agua; el caudal es tan bajo que impide la comunicación fluvial. Las especies animales que habitan en el río se ven afectadas, y la actividad comercial está paralizada.
Se observa que el trabajo humano y el descuido, junto con acciones dolosas en los bosques y cultivos, pueden generar incendios, causando enormes daños en miles de hectáreas. Aumenta la temperatura y no llueve. Los cultivos se pierden, la tierra se convierte en un desierto árido, donde mueren plantas, animales y, lamentablemente, algunos campesinos. Este es un escenario agresivo, con incremento del dióxido de carbono y el calentamiento del ambiente.
Tuve la oportunidad de vivir y observar acontecimientos similares en Europa en el año 2023, durante el verano del hemisferio norte. Hubo incendios forestales masivos que arrasaron miles de hectáreas de bosques en Portugal, España, Italia, Turquía y el norte de África, en Marruecos. En España, la tercera parte de la extensión de las Islas Canarias fue consumida por los incendios. Sin embargo, la respuesta de la comunidad europea fue rápida y eficaz.
El grave problema de por qué se están presentando incendios masivos y recurrentes en muchos lugares del planeta desde el año 2023 nos indica que este problema mundial está relacionado con la contaminación ambiental y el calentamiento global. La Tierra soporta agresiones físicas que influyen en el deterioro del suelo, el aire y el agua (mar y ríos), afectando la vida de los seres humanos y las especies animales y vegetales. Entender esta situación es vital.
Hoy más que nunca, en la Tierra las leyes de la física y la biología se combinan para explicar la conexión que existe entre los continentes y países, incluyendo los océanos y la atmósfera. Por ello, el cambio climático y el calentamiento global se manifiestan en todo el planeta. Aunque en algunos países puede haber causas particulares que generen incendios forestales, la causa principal es la contaminación ambiental y el cambio climático, que afectan a todo el mundo.
Si continúan las agresiones a la Tierra por la acción humana, se producirán alteraciones cada vez más intensas tanto en el mundo físico como en el biológico, y la humanidad podría desaparecer si no encontramos una solución rápida antes de que sea demasiado tarde. Así también, en el Perú, el gobierno, las autoridades y los funcionarios deben, de manera inmediata, observar y actuar para ayudar al "país del interior", que arde por incendios y por el olvido de más de 200 años.
Médico especialista en Medicina Interna y especialista en Reumatología. Magíster y doctor en Medicina, por la Universidad Peruana Cayetano Heredia. Profesor de Escuela de Posgrado y Past decano de la Facultad de Medicina de la U. Nacional de Trujillo. Cultiva las áreas de educación universitaria y filosofía de la ciencia.