Cargando...
Inmigración

Inmigrante veterano del Ejército de Estados Unidos se autodeporta luego de casi 50 años: "No puedo creer que esto esté pasando"

El originario de Corea del Sur fue condecorado con un Corazón Púrpura, reconocimiento otorgado a cualquier militar que haya resultado herido o muerto durante combate.

Veterano inmigrante condecorado se autodeporta luego de 50 años
Veterano inmigrante condecorado se autodeporta luego de 50 años | Martin Divisek | EFE

Luego de 50 años como residente de los Estados Unidos, Sae Joon Park, veterano del ejército norteamericano, tuvo que autodeportarse de regreso a Corea del Sur tras una orden de expulsión por cargos relacionados a drogas e incomparecencia judicial de hace más de 15 años. Según el ciudadano, estos tienen su origen en un trastorno de estrés postraumático no tratado.

En declaraciones al medio NPR, el veterano indicó que toda esta situación, agravada por las nuevas políticas contra inmigrantes, le parece algo surreal. "No puedo creer que esto esté pasando en Estados Unidos (...) Me impresiona, como un país por el que luché", declaró Park.

Inmigrante llegó a Estados Unidos a los 7 años y se enlistó al Ejército a los 20

Sae Joon Park llegó a los 7 años a Estados Unidos desde Corea del Sur para reunirse con su madre en Miami, y poco después se mudaron a Los Ángeles. Sin muchas influencias positivas durante su niñez, encontró inspiración en su tío, coronel del ejército surcoreano, y decidió enlistarse en el Ejército de Estados Unidos luego de terminar la secundaria. A los 20 años, fue enviado a Panamá, donde participó de la invasión estadounidense de 1989 para derrocar a Manuel Noriega, la Operación Causa Justa.

Un día, durante la hora de almuerzo, recibió un disparo en la espalda por parte de soldados panameños y sintió su cuerpo paralizarse. "Pensé: 'Dios mío, no solo estoy paralizado. Me estoy muriendo ahora mismo'”, recordó. Más tarde, fue regresado a Estados Unidos, dado de baja y condecorado con el Corazón Púrpura, el reconocimiento otorgado a militares heridos en combate.

Sin embargo, su recuperación física no llegó junto a una emocional: pasó tiempo con un Trastorno de Estrés Postraumático no diagnosticado o tratado que lo arrojó al consumo de drogas. "Desde pesadillas mientras dormía hasta pensamientos de miedo constantes. No podía ver películas de terror ni oír ruidos fuertes", dijo al respecto. Durante una década, luchó con su adicción al crack.

Durante una reunión en Nueva York con un traficante, fue arrestado por la Policía. Más tarde, temiendo no poder cumplir con las condiciones impuestas por un juez, que le pidió no volver a menos que se encontrase limpio, faltó a una audiencia. "Me asusté y me fugué de la cárcel", Afirmó. Esto le valió una acusación por posesión de drogas y violación de la fianza, lo que cerró posibilidades de naturalización y de algún alivio respecto a una orden de deportación.

Ciudadano ya se encuentra deportado en Corea del Sur

Luego de haber estado en prisión durante tres años desde 2009, Park se mudó a Hawaii, donde vivía su familia. Aquí, encontró trabajo y crio a sus hijos. A pesar de haber recibido una orden de deportación en ese tiempo, el Gobierno lo dejó quedarse bajo la condición de presentarse a controles anuales con agentes de ICE, y lo hizo. Sin embargo, a principios de este mes, funcionarios de inmigración le indicaron que debía abandonar Estados Unidos; de lo contrario, sería detenido y deportado.

Entonces, aceptando su salida del país, aprovechó sus últimos momentos junto a su familia y sus amigos. "Tengo que aceptar el hecho de que probablemente ésta sea la última vez que la veré", dijo respecto a su madre. Este lunes 23 de junio, finalmente, tomó un avión de regreso a Corea del Sur. “Incluso después de todo lo que pasé, no me arrepiento de haberme unido al ejército ni de haber recibido un disparo. Es parte de mi vida, de mi trayectoria. Me ha convertido en quien soy hoy”, sentenció.

Ofertas

Lo Más Reciente