La basura se acumula como un problema que parece no tener solución definitiva porque el único cliente es el Estado. Sin embargo, esto está cambiando. La minería de Bitcoin permite que el metano liberado por la basura sea capturado por máquinas especializadas para competir en la producción de Bitcoin, que hoy vale 88 mil dólares o 330 mil soles.
Actualmente, es posible convertir basura en energía y usar esa energía para minar Bitcoin. Este proceso, lejos de ser una fantasía futurista, ya se está implementando. Empresas como Marathon Digital, en Utah, aprovechan el metano de los vertederos para generar electricidad y alimentar operaciones de minería. Esto no solo reduce las emisiones de gases contaminantes, sino que también transforma lo que antes era un pasivo ambiental en un recurso económico.
Imaginemos lo que esto significa para nuestras ciudades: menos basura, menos contaminación y más dinero para quien realice el servicio.
Porque, hasta el día de hoy, nadie se ha preocupado por dar a conocer la separación del dinero del Estado, salvo este diario.