Verónika Mendoza. Candidata presidencial por el Frente Amplio., Al parecer, ya salió del rubro “otros” en las encuestas. ¿Es una noticia alentadora para terminar el año? Nuestro objetivo es darle al Perú una alternativa política seria, eficiente y renovadora. También queremos discutir algunos criterios comunes y poner en la agenda ciertos temas dejados de lado. Por ejemplo, creemos que se necesita un Estado moderno, fuerte y eficiente, que garantice derechos como salud, educación y pensiones. La clase política que hemos tenido siempre ha defendido que estos derechos se conviertan en negocios. PUEDES VER: Estas fueron las 12 frases que remecieron la política peruana en el 2015 | FOTOS ¿Le gustaría que los medios la tomaran más en serio? Me gustaría que hubiese más facilidades para acceder a ellos, pero tampoco son la única vía para llegar a los ciudadanos. Está el contacto directo con la gente, las redes sociales. No tenemos las facilidades de otros, el dinero o el nivel de reconocimiento de quienes llevan años promocionándose. ¿En qué se diferencia usted de todos los demás? Planteamos recuperar al Estado de las garras de la corrupción, modernizarlo y ponerlo al servicio de la gente. ¿Su propuesta es más Estado? Más y mejor Estado. Los últimos gobiernos han promovido el debilitamiento del Estado en su función reguladora y promotora del desarrollo económico, pretendiendo que todo se resuelve con el mercado. El Estado, en alianza con el sector privado, debe promover la diversificación productiva. Eso suena muy difuso. Dígame un ejemplo. Hay que reactivar la economía con énfasis en los sectores que más empleo generan, como las micro y pequeñas empresas. Planteamos que el Estado constituya un fondo de 10 mil millones de soles para facilitar el acceso a crédito de las mypes, sin leoninas tasas de interés. ¿Y cómo piensa financiar eso? Ese fondo equivale al 0,3% del PBI, que es lo que este gobierno exoneró a las grandes empresas por concepto de impuesto a la renta. ¿Es usted la bestia antiminera que nos dicen? ¿Qué prefiere: minería o medio ambiente? Ambas. Respalda la actividad minera entonces. Sé que ha habido una estigmatización conmigo y con el Frente Amplio, pero necesitamos inversiones mineras que respeten las reglas. Esto no ha sido así. El MINEM permitió y avaló 25 proyectos en territorios de pueblos indígenas sin consulta previa. Y eso significa conflictos con muertos. Dígame un caso en el que minería y medio ambiente convivan, que pueda servir de modelo. Yo puedo hablar de lo que conozco. He visto proyectos mineros en el Cusco, como Estrata, donde en cierto momento se tuvo un buen nivel de relación con la comunidad, pero luego derivó en problemas de contaminación permitidos por el propio Estado. ¿No conoce un proyecto minero que haya tenido una buena relación con el medio ambiente? Debe haber alguno, yo no lo he visto. En todo caso, proponemos un organismo de fiscalización que prevenga y sancione los problemas de contaminación, revisando los estudios de impacto ambiental. ¿Eso no lo hace ya el Senace? En realidad, se trata de fortalecer a todo el sector ambiental. Yo he visto comunidades que han llegado al Congreso planteando problemas de contaminación; he visto en Loreto lagunas negras de petróleo... ¿Cuál sería su alternativa de desarrollo para no depender tanto de proyectos mineros? Los precios de los minerales se han reducido y la economía se ha desacelerado. Eso debió preverse con un proceso de diversificación productiva. Se necesita un desarrollo económico desde el territorio, para que en cada región puedan identificarse sus potencialidades: minería, agricultura, turismo, pesca, manejo sostenible de bosques. ¿Le mortifica el mote de 'antiminera'? Me fastidia que todo aquel que plantea críticas o alternativas a la minería sea tachado de 'antiminero'. Eso impide debatir seriamente la promoción de otras actividades. ¿Por qué cree que se cuestiona tanto a quienes critican la actividad minera? Porque se ha permitido una excesiva presencia y dependencia de la minería en la economía. Todo eso va de la mano con una lógica autoritaria, con proyectos que se han querido imponer a sangre y fuego. Es que el sector minero tiene un enorme poder político. Se han exonerado 30 millones de soles en multas por contaminación. Eso da un mensaje nefasto. La izquierda compite dividida y con pocas opciones. ¿Por qué la izquierda peruana luce derrotada por anticipado? Voy a relativizar esa afirmación. Quienes han ganado las elecciones en los últimos procesos han sido candidatos que han puesto por delante propuestas que vienen de la izquierda. Incluso la hoja de ruta era programáticamente de izquierda. El propio García decía que eliminaría el TLC, que cerraría los services. El problema es que ninguno cumplió. ¿Lo que usted propone ahora, entonces, es parecido a lo que proponían García y Humala? No, de ninguna manera. Pero termino de responder: estamos en medio de un proceso, no de dispersión, sino de articulación. El FA es una organización que convoca a otras como el Partido Socialista o el Bloque Nacional Popular, de Sergio Tejada. Organizaciones incipientes. No voy a magnificar lo que tenemos, pero es gente que quiere hacer política de forma seria. ¿Qué hay en otros lados? Franquicias. ¿Qué significa ser de izquierda para usted? A la izquierda se le asocia con violencia, pero es defender el bien público por sobre lo individual y lo privado, garantizar que la salud, la educación, la vivienda y las pensiones, antes que meros negocios, sean derechos a los que todos puedan acceder, y es entender y defender la diversidad. ¿Le molesta que cada vez que le hacen una entrevista le pregunten por Venezuela? No que lo mencionen, pero sí mortifica que sea lo único que pregunten. Con eso, se hacen invisibles nuestras propuestas. El mismo ensañamiento existe con el tema de la concentración de medios, porque nosotros hemos dicho que es legítimo y necesario que el Estado regule la propiedad en los medios de comunicación para defender la libertad de expresión y el derecho ciudadano de acceder a una información plural. ¿Por qué le insisten tanto con el caso venezolano? Eso habría que preguntárselo a tus colegas. ¿No será que es 'aguatibia'? Algo que podría haber incomodado es que yo he dicho que debe respetarse la soberanía del pueblo venezolano. Reconozco que hay una grave crisis política y económica en Venezuela, que hay vulneración de derechos humanos, que no se respeta necesariamente la libertad de prensa. Así como vemos la paja en el ojo ajeno, veamos la que hay en el nuestro. Acá tampoco se respeta la libertad de prensa. No es una comparación muy feliz. Se puede decir mucho de este gobierno pero a Nadine Heredia le han dedicado más portadas negativas que a nadie. Yo pienso en esos 57 muertos por conflictos sociales en el Perú, líderes que ejercieron su derecho de protesta y fueron asesinados. Sobre ellos nadie dice nada. Eso indigna. Bien que haya preocupación por Venezuela, pero también debemos ver lo que ocurre acá.
Edición Impresa - La Republica | Lima - Domingo 24 de Noviembre del 2024