La terrible noticia de Donald Trump para inmigrantes en Estados Unidos que aspiran a la ciudadanía americana
Tras tomar posesión de la presidencia, el empresario republicano implementó diversas iniciativas, incluidas políticas migratorias que afectan a una gran parte de la población en Estados Unidos.
Donald Trump, desde su campaña política, anunció reformas para diferentes sectores de Estados Unidos, entre ellos se encuentra el tema de la inmigración. El sucesor de Joe Biden encendió las alarmas en la comunidad inmigrante, especialmente quienes aspiran a obtener la ciudadanía americana.
Entre las principales preocupaciones se encuentran las políticas que podrían impactar tanto a aquellos beneficiados por programas de protección temporal como a quienes están en proceso de obtener su residencia permanente. A continuación, se presentan las posibles consecuencias de este enfoque en política migratoria y su influencia en quienes buscan regularizar su estatus como ciudadanos en Estados Unidos.
Los nuevos cambios en la ciudadanía americana tras la llegada de Trump
Con Donald Trump en la presidencia, una de las medidas más significativas es la posible restricción de las opciones de ciudadanía para residentes permanentes. Su administración estudia la posibilidad de endurecer los requisitos de naturalización, exigiendo pruebas más estrictas de integración social y un historial fiscal impecable. Según el gobierno de Estados Unidos, estas reformas están orientadas a priorizar la ciudadanía para aquellos que muestren un compromiso firme con el país.
También se ha propuesto una evaluación más estricta de los antecedentes laborales y de seguridad social de los solicitantes. Esta medida impactaría particularmente a los residentes permanentes que no han logrado mantener un empleo estable o han enfrentado problemas económicos.
Los abogados especializados en inmigración señalan que estas nuevas restricciones dificultarían el proceso de obtención de la ciudadanía y generarían obstáculos adicionales para quienes llevan años residiendo legalmente en el país.
Durante su primer mandato, Trump aseguró que deportará a los inmigrantes ilegales en Estados Unidos. Foto: AFP.
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¿Puede Trump cumplir la 'mayor deportación de la historia'?
Durante su campaña, Trump destacó como una de sus principales promesas llevar a cabo la mayor deportación de migrantes indocumentados en la historia de Estados Unidos, un plan que podría impactar a cerca de 11 millones de personas. Esta propuesta se apoyaría en la denominada “Operación Aurora", fundamentada en una ley empleada en tiempos de guerra que permite la expulsión de individuos considerados enemigos del país.
Desde su promulgación a fines del siglo XVIII, esta legislación solo se ha aplicado en tres ocasiones: en la guerra de 1812, y durante la Primera y Segunda Guerra Mundial. Las organizaciones latinas de derechos civiles advierten que esta operación no solo afectaría a migrantes indocumentados.
En diversas declaraciones, Donald Trump ha equiparado a los migrantes sin documentos con criminales, acusándolos de cometer delitos graves y considerándolos enemigos de la nación. Según él, estas personas también desplazan a los trabajadores estadounidenses y contribuyen al desempleo, aunque estudios indican que una deportación masiva afectaría negativamente la economía del país.
Donald Trump y Joe Biden se reúnen en la Casa Blanca para iniciar la transferencia de poder. Foto: AFP
Las políticas migratorias en Estados Unidos tras la llegada de Trump
La llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos ha reavivado el debate sobre las políticas migratorias del país, marcadas por un enfoque más restrictivo. Desde su primera administración, Trump se caracterizó por implementar medidas que endurecían el acceso al país y complicaban los procesos de regularización migratoria. En su regreso al poder, ha prometido continuar con una postura firme, priorizando la seguridad fronteriza y la reducción de la inmigración ilegal.
Entre las acciones más destacadas, Trump ha propuesto limitar los beneficios de programas como el Estatus de Protección Temporal (TPS) y endurecer los requisitos para la obtención de la residencia permanente y la ciudadanía. Además, su administración busca reforzar la identificación de votantes con pruebas de ciudadanía, un cambio significativo frente a las políticas actuales. Estas medidas, que podrían impactar directamente a millones de inmigrantes, generan preocupación entre las comunidades afectadas y los defensores de los derechos migratorios.
