Los conflictos socioambientales tienden a expandirse en el país, principalmente en las zonas minero-energéticas, lo cual complica aún más la crisis política que se vive.
Según reporte de la Defensoría del Pueblo, los conflictos registrados en setiembre, entre nuevos, activos y latentes, alcanzaron un total de 211, el mayor de los últimos doce meses. De esta cifra, 91 se desarrollan en las nueve regiones que conforman la zona macronorte.
Y precisamente Loreto encabeza la estadística con 29 conflictos sociales, el mayor número a nivel nacional. Le siguen Áncash (15), Piura (13) y Cajamarca (10). Además, Amazonas (9), San Martín (7), Lambayeque (4), La Libertad (3) y Tumbes (1).
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El 2 de noviembre, las comunidades de Cuninico, distrito loretano de Urarinas, tomaron el control del río Marañón para exigir al gobierno atención concreta y la remediación de los sitios afectados por el derrame de petróleo ocurrido el 16 de setiembre.
Tras anunciar un día antes, mediante un comunicado, que no dejarían pasar ningún tipo de nave, el 3 de noviembre retuvieron una lancha con más de cien pasajeros, entre ellos turistas extranjeros y nacionales. Durante las largas horas de permanencia obligada en Cuninico, los retenidos se quedaron sin agua, elemento que los comuneros no pudieron entregarles porque ni ellos mismos disponían de este bien.
Ayer, en conferencia de prensa, la ministra de Energía y Minas, Alessandra Herrera, negó que el Gobierno haya desatendido las demandas de los comuneros.
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“Hemos venido desarrollando reuniones de trabajo para atender las necesidades inmediatas producto de este derrame”, sostuvo.
También indicó que ayer se reunieron en Nauta con los comuneros de Urarinas y también con los de Parinari. Asimismo, dijo que la embarcación retenida en Cuninico ya había sido liberada e iba rumbo a Nauta.
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En tanto, los pobladores de la provincia cusqueña de Espinar, agrupados en el Frente Único de los Intereses de la Provincia de Espinar (Fudie), anuncian un paro indefinido a partir del lunes 7 de noviembre.
El presidente de esta organización, Sergio Huamaní, informó que la protesta se desarrollará mediante movilizaciones y no descartó la toma del Corredor Minero Sur.
Exigió que se atienda la reformulación del Convenio Marco, las denuncias de corrupción en la municipalidad provincial y el pago de un bono de dos mil soles a los pobladores, con los fondos del Convenio Marco.
“Lamentablemente, la Fiscalía de la Nación no da una mirada, a través de sus fiscalías anticorrupción que hay en Cusco, a la corrupción que existe dentro de la municipalidad provincial de Espinar. También está el tema del bono de dos mil soles a favor de los pobladores. Además, la reformulación del Convenio Marco que no se soluciona desde el año 2012 en que hemos tenido muchas mesas de diálogo sin resultados concretos”, declaró el dirigente.
Y en la ciudad del Cusco, el Sindicato de Trabajadores CAS de la Dirección Desconcentrada de Cultura cumplió ayer un paro de 48 horas ante el incumplimiento del compromiso del Ejecutivo de hacer una excepción con esta institución respecto a los alcances del decreto supremo 043-22.
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La norma señala que los recursos obtenidos por el ingreso a Machu Picchu deben ser centralizados. Los trabajadores exigen que dichos ingresos se queden en la antigua capital del imperio inca. Durante la protesta, los parques arqueológicos fueron cerrados afectando a turistas nacionales y extranjeros.
Este es el panorama social que también encontrará la comisión de alto nivel de la OEA en su visita del 20 de noviembre.
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A las protestas por demandas socioambientales se suma la marcha nacional que se desarrollará hoy sábado 5 de noviembre para exigir que “se vayan todos”, Ejecutivo y Legislativo, y se realicen nuevas elecciones generales.
Según Lucas Ghersi, miembro del comité organizador, la movilización que se concentrará en el Paseo de los Héroes Navales tiene por finalidad expresar la frustración de los peruanos que están hartos de la crisis política. Señaló que la salida al entrampamiento político es que se den nuevas elecciones.
Estas manifestaciones empezaron muy raleadas. La consigna inicial era solo la salida del presidente Pedro Castillo. Y como el Legislativo prefirió dejar las cosas como están y continuar en el cargo, ahora exigen la salida de ambos poderes.
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Cusco. Esta región registra 18 conflictos. De setiembre a noviembre, se han producido 7 protestas en las provincias de Chumbivilcas, Espinar y Paruro, con bloqueos en el Corredor Minero. En Velille, esta vía continúa bloqueada desde el 28 de octubre.