Oscar Carrillo ha regresado al teatro después de seis años. Se ha vestido de uniforme castrense y se puso a las órdenes de Edgar Saba, con quien siempre había querido trabajar. Se ha puesto en la piel del Teniente Silva, uno de los personajes de '¿Quién mató a Palomino Molero?' de Mario Vargas Llosa, precisamente uno de sus autores preferidos. Todo se confabuló para convertirse en la propuesta ideal.
'¿Quién mató a Palomino Molero?' es la octava novela del nobel peruano. Publicada en 1986 narra el descubrimiento de un cuerpo brutalmente asesinado del joven aviador Palomino Molero. Se basa en hechos ocurridos en los años cincuenta y cuenta con un elenco de grandes actores que se lucen de inicio a fin. El personaje de Carrillo, siempre recordado por ser parte de una interesante generación de actores que salieron en los 90, es crucial en la investigación de la muerte de Molero, que tiene a su madre y los vecinos en la desolación y la intriga.
Oscar, has dicho que el teniente Silva, es un personaje contradictorio, que hace su tarea, pero con sentido del humor. ¿Cuáles han sido tus herramientas para darle vida?
Bueno, en realidad ha sido mucho la guía de Edgar (Saba). Uno como actor empieza con una idea y en el camino el director te va diciendo: muy bien, continúa en ese camino o incorpora esto, fíjate en ese momento que hay esa posibilidad también y así. Ha sido un trabajo muy a detalle. Cuando íbamos avanzando las escenas, Edgar nos hacía aprovechar los momentos, los textos, las múltiples posibilidades que había. Entonces, él ha ido como tallando ese proceso. Yo como actor simplemente he tenido que seguir esa posibilidad que nos planteaba.
Es una obra intensa, conmovedora, pero también tiene momentos divertidos.
Sí, al inicio no lo había imaginado tan divertido, fue el mismo sentido del humor de Edgar que nos ha ido guiando.
¿Qué te atrajo más del personaje?
Hubo varias razones. Primero, porque se trataba de una historia de Vargas Llosa. También porque se trataba del Teatro Marsano que tiene toda una historia en el Perú. En algún momento llamado unl teatro, entre comillas, comercial, pero fuera lo que sea es toda una institución, es parte de la historia del teatro en el Perú. Otra razón es porque se trataba de Edgar, me parece un director muy intenso, muy bacán. Nunca había trabajado con él. Tenía interés. Y, claro, también por la novela, la había leído hace mucho tiempo. Para serte honesto y puede sonar muy común, pero para mi Vargas Llosa es uno de mis escritores favoritos, he leído todas sus novelas, entonces ya conocía esta historia y me interesó participar.
'¿Quién mató a Palomino Molero?, reúne a un talentosos elenco. Foto: difusión
'¿Quién mató a Palomino Molero?' cumplirá dentro de poco 40 años de haber sido escrita. Plantea temas que van desde el abuso de poder, corrupción y discriminación. Es una historia, sin duda, atemporal.
Y aunque la obra fue escrita en el 86, habla de sucesos ocurridos en los años 50. Estamos hablando casi de 70 años por lo menos de las mismas circunstancias con problemas estructurales como el racismo, el clasismo, la separación de clases, la debilidad institucional, el machismo, que siguen siendo problemas en el Perú. Eso no ha cambiado, eso desgraciadamente toma un proceso muy largo, toma tiempo.
Tantas décadas y seguimos viendo lo mismo. Es desolador ¿no?.
Si pues, es como si cambiáramos de cantores, pero el escenario es el mismo. En los últimos años, precisamente en los años 90, empezó un deterioro institucional como no se tenía antes, inclusive ya las instituciones políticas eran débiles antes, el uso político de las instituciones que ha terminado en convertirse en marionetas de cualquier cosa, es un problema muy serio en el Perú. La obra refleja eso también un poco, las relaciones entre poderes. Las instituciones como la militar y la policía, cómo se acercan estas a la sociedad, que tan cerca o tan lejos están de ella, que tan divididas están, que tanto realmente son protectoras de la sociedad o terminan siendo más bien agresivas.
¿Qué tan importante es presentar en el teatro este tipo de historias?
Bueno, nos recuerda quienes somos, nos mantiene en nuestra historia. Como bien dicen, el país que no recuerda su historia está condenada a repetirla. Entonces el teatro tiene esa función. El teatro tiene la posibilidad adicional, mucho más personal, quizás con mayor cantidad de sugerencias que puede tener el cine. El cine muchas veces tiene restricciones que tienen que ver con el presupuesto, con el aparato de producción ahora que el cine depende mucho del streaming, pero el teatro no, el teatro es mucho más libre, el teatro se acerca más a la autoría. En este caso, no solo es la visión de Vargas Llosa a través de su novela, sino la visión de Edgar a través de la interpretación de la novela de Vargas Llosa en convertirla en teatro.
Carrillo y Susan León en escena. Foto: difusión
Edgar comentaba que esta era una obra que estaba en deuda. ¿Qué es lo que tú tienes pendiente?
Ah no sé, justamente no tengo un personaje en mente, no tengo un personaje que tenga soñado hacer quizás. Pero me gustaría dirigir más bien, es una idea que tengo en la cabeza, pero dirigir más que actuar.
Cuando se habla o lee de ti, siempre se te vincula con esa añoranza a las telenovelas de los años 90. ¿Qué te produce eso?
Tu lo has dicho, es una nostalgia, pero no solo por mí, sino por toda una generación de actores que empezamos muy jóvenes. Mónica Sánchez, yo, Bruno Odar, Miguel Iza, María Angélica Vega. Un montón de actores que empezamos juntos en esa época, nos juntamos una sola generación en un mismo producto, eso fue espectacular, una sensación de pertenecer a algo, que es algo que yo siempre he dicho. Nunca he querido hacer una carrera porque realmente nunca me he sentido corriendo detrás de nada. Yo lo que siempre he querido es pertenecer a algo, pertenecer a una comunidad, pertenecer a un proyecto, pertenecer a una idea, eso es lo que me estimula a mí cuando hago un trabajo.
En paralelo, estás haciendo televisión
Si, estoy grabando 'Tu nombre y el mío' (América Televisión). Mi personaje es Marcial, un hombre que vive en la misma comunidad del grupo Néctar, es un tipo envidiosillo, medio malo, medio tontón, me encanta. No es el típico malo.
EL DATO: '¿Quién mató a Palomino Molero?' va en el teatro Marsano, General Suárez 409, Miraflores.De miércoles a sábado 8 pm. Domingo 7 pm. El elenco reúne a experimentados actores y actrices: Gustavo Bueno, Haydeé Cáceres, Oscar Carrillo, Ramón García, Susan León, Oscar Beltrán, Claudio Calmet, Gabriel Gil y Marialola Arispe. Entradas en Teleticket y en el mismo teatro.