Que se convoque asamblea constituyente para una nueva constitución y a ver si así empezamos a desfujimorizar la política.,Algunos fantaseamos con Vizcarra bajando de ese avión vestido con un maravilloso traje de control de plagas, de la cabeza a los pies, y preparado para la desratización del gobierno. A mí no me den menos que eso. Sus primeras horas como presidente van a ser claves para que el pueblo peruano entienda si el hombre ha venido en calidad de fumigador o más bien a sumarse como una vizcacha más al festín del raterío. Uno de sus primeros movimientos, debería ser, demostrar con palabras lo que tuiteó hace unas horas, es decir que se pone a disposición del país, entendiendo país como ciudadanía, como razón de ser de la acción política, y hacerlo en modo y actitud de escucha. ¿Qué quieren ahora los peruanos indignados, los que salieron ayer a las calles? El pueblo está pidiendo, por un lado, que se vayan todos, y ha sido muy claro: eso significa llamar a nuevas elecciones pero con garantías máximas, para que no se escabullan otra vez las ratas, que ya sabemos lo rápido que se reproducen. Si el ciudadano consciente pide elecciones es porque no quiere a los mismos que están ahí sentados, ni un baile de sillas; demanda gobernantes que no les roben, que no sean vendepatrias, que no acaben en la cárcel como los demás. La política es vertiginosa, apenas nos da ha dado tiempo para sobrecogernos, repantigarnos y desear otra cosa, aunque la mayoría finjamos lo contrario, aunque nos vean pontificando sobre todos los escenarios posibles. ¡No tenemos ni puñetera idea, igual que tú! Vizcarra viene con la fama al hombro de haber hecho de Moquegua un Perú a pequeña escala y de haberse conducido honestamente. Aunque ya no le creo ni a mi mamá, quién sabe si en estas horas determinantes el tipo hace bien su trabajo de desratizarnos la casa y quizá hasta no haga falta apurar tanto las elecciones. Puestas a pedir: que se convoque asamblea constituyente para una nueva constitución y a ver si así empezamos a desfujimorizar la política, o lo que es lo mismo a desratizarla. Estamos anhelantes de verlo llegar con ese traje para la ocasión, sr. Vizcarra. Ya sabe por dónde comenzar el exterminio.