Según relata el medio ABC, el príncipe Louis tuvo una discusión con su madre mientras observaban el desfile en el centro de Londres. Aburrido, el pequeño de 4 años comenzó a hacer muecas exageradas y señales con las manos, e incluso llegó a cubrirle la boca a la duquesa Catherine, quien no podía contener el mal carácter de su hijo. Otro que intentó calmar al menor fue el esposo de Zara Phillips, la sobrina nieta de la reina Isabel II, sin éxito alguno. El menor no parecía responder a las reprimendas, hasta que fue llevado hacía el regazo de su abuelo Carlos, donde finalmente se tranquilizó. Video: CBS News