Muchas veces nos aparecen memes o videos en las redes con el texto de “esto solo ocurre en “perusalem”, ¿no?. Alguna vez escuché, del maestro psicoanalista Don Max Hernández, que es posible que los peruanos, en lo bueno y en lo malo, nos auto percibamos más singulares y especiales de lo que realmente somos. No obstante, la denuncia sobre la existencia de una red de prostitución dentro del parlamento nos refuerza esa auto percepción. Como si a este congreso pedorro le faltara algo para consagrar su divorcio con la ciudadanía que, sí,, lamentablemente los eligió. Como si a las repartijas de puestos, las mochadas de sueldo, las normas a favor de sus corruptos y contra la ciudadanía, sus gollerías, sus atentados contra la institucionalidad, en suma, a su prostitución por intereses subalternos como la minería ilegal, la informalidad, la depredación, el narcotráfico, etc., ahora hay que agregarle su calidad de burdel. Como alguien dijo por allí: “el primer burdel del estado”, mafias, asesores y sicariato de por medio bajo investigación. Completemos, abarquémoslo todo sin pudor: “El Perú es un burdel”, de Macera, más vigente que nunca.
Me faltan herramientas psiquiátricas y psicológicas para interpretar las últimas declaraciones de nuestra presidenta. Quiero saber lo que hay detrás de una persona que para frasea las palabras que Jesucristo, supuestamente, dijo en la cruz, como intermediario ante Dios. Cuando pide clemencia para aquellos que lo crucifican, demostrado su compasión y su disposición a perdonar, incluso en momentos de sufrimiento intenso. De acuerdo a la doctrina católica, hablamos de divinidad, de lo sagrado. Pues Dina cometió, cínicamente, yo diría con un narcicismo clínico, una vil “apropiación cultural” cuando, al dirigirse a los ciudadanos de Chalhuanca, en Apurimac, pronunció, refiriéndose a al récord negativo de su 3% de aprobación: “Yo solamente sonrió y digo: Señor, perdónalos porque no saben lo que dicen ni lo que encuestan, acá está el pueblo peruano”. ¿Dónde se sitúa Dina en su imaginario?, ¿Cómo una espacie de Jesús? Muy peligroso.
Rejas para controlar a los vendedores ambulantes que, a pesar de ellas, siguen ingresando, incluso les cobran cupo. Mesa redonda recibe miles, decenas de miles, cientos de miles, en estos días. La solución por la que la autoridad optó: poner rejas en un avispero donde alguna vez murieron más de 300 personas en un incendio. Poner rejas donde ya no hay espacio ni para las ambulancias o para las bombas de los bomberos. Pese a todo, seguimos yendo. La municipalidad de Lima, juega a la lotería junto a nosotros, apuesta por la suerte, por el azar, por la probabilidad. Y le pone rejas. La reubicación y el control de los ambulantes le queda demasiado grande la potencia mundial
Hablando de potencia mundial, lo ocurrido con el puente que, se supone, va a unir Miraflores con Barranco, es un crimen de lesa humanidad. Los políticos, sean gobernadores regionales de provincia, o sean alcaldes del pavoneado Miraflores, no aprenden. Romper las pistas de la Avenida del ejército, de la avenida Comandante Espinar, dosificar la bajada Armendáriz debido a la paralización del bendito puente, inaugurar el nuevo carril de la bajada Balta cuando aún no está terminado y contribuir con la congestión, todo esto al mismo tiempo y en temporada navideña y de verano, merece cadena perpetua. ¿De qué partido es el alcalde de Miraflores? Del que nos prometió que Lima iba a ser potencia mundial.
René Gastelumendi. Autor de contenidos y de las últimas noticias del diario La República. Experiencia como redactor en varias temáticas y secciones sobre noticias de hoy en Perú y el mundo.