Ofrendas, por Sonaly Tuesta

“Al finalizar, todos habremos cumplido y las ofrendas irán al fuego, a convertirse en cenizas y a ser expulsadas por el viento que hace un instante ha regresado”.

Jacinto Huaynacho, el yatiri o maestro, se acomoda en el centro, solemne. El ajetreo les pertenece a sus asistentes, quienes apuran en preparar los ingredientes para que coman los apus y la pachamama. Me pregunto por qué mezclan el agua y el maíz molido: ¿saciará la sed de la tierra? O es una pócima sagrada para propiciar que los animales sepan dejar el canchón e irse a las alturas a buscar su alimento. 

-Serán dos ofrendas -me dicen.

-La grande es de la pachamama y la pequeña es del ganado.

Ubico en el borde del tejido a tres parejas de animales de yeso: dos alpacas, dos ovejas y dos vacunos. Están cubiertas de serpentinas. Es la fiesta, esa celebración, por la fertilidad asociada a San Juanito. No están las vacas y toros, pero igual los tenemos presentes.

Don Jacinto ordena los dulces (caramelos y chocolates). Ha repartido el unto o cebo de la alpaca para devolverlo a la mesa en nuestro nombre. Menestras, arroces y fideos se acomodan en las mesas y el maestro invita a los asistentes a recoger sus hojas de coca y armar el quintu.

-Debes echarle tu aliento a la hoja unas tres veces –escucho, reacomodo las hojitas de coca entre mis dedos y procedo.

Al finalizar, todos habremos cumplido y las ofrendas irán al fuego, a convertirse en cenizas y a ser expulsadas por el viento que hace un instante ha regresado. El yatiri observa, Rubén sostiene la sandía y advierte que cuando la corte todos debemos gritar “muuu”, como si la enorme fruta fuese el toro que derrama su sangre, proporcionándonos la “carne roja” de alimento, ahora que aligeramos equipaje y entramos en armonía con la naturaleza.

Deberíamos irnos, total, la Hilaria tiene otra historia. Sucede en la chacra, cerquita de las papas que están naciendo, entre la hierba, junto a la bosta que arde una vez más. Es el chaqrataripaq, lo tengo anotado, entre paréntesis y un signo de igual que une a la palabra agradecimiento. Para que venga la buena cosecha.

Sonaly Tuesta

La costumbre

Comunicadora Social. Creadora del programa de televisión Costumbres. Personalidad Meritoria de la Cultura desde el 2015.