El imperio de la sandez, por Jorge Bruce

“Las sandeces de nuestros políticos –no vale la pena hablar del Congreso con su 90 % de desaprobación– erosionan la poca confianza que los peruanos tenemos en la democracia”.

Altos funcionarios del Estado peruano parecen convencidos de que, ante su incapacidad para resolver los gravísimos problemas que nos aquejan, la mejor respuesta es la sandez: despropósito, simpleza, necedad (DRAE). Así, el inefable alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, pretende ocultar su incompetencia mundial, lanzándose de narices a incumplir un contrato con la empresa Rutas de Lima que nos costará una fortuna. El propio ministro de Economía lo ha puesto en evidencia, asegurando que el MEF no le va a dar la gigantesca suma de dinero que, acaso en los efluvios de una intoxicación, declaró que resolvería el problema.

Como esta, los peruanos nos hemos resignado a escuchar declaraciones políticas disparatadas, día tras día. El premier Otárola, ante la imparable ola de delincuencia que nos oprime, afirma que todo se va a resolver recurriendo al ‘método Bukele’. Alguien me decía que estas promesas son marca Telesup: una fachada que oculta el… vacío.

Las imágenes de centenas de hombres rapados y tatuados, hacinados como reses, pueden satisfacer el miedo de las personas cuyas vidas son cada día más duras por obra y gracia de los asaltantes. Pero el costo de suprimir la presunción de inocencia y las garantías de un Poder Judicial democrático –así sea tan deficiente como el nuestro–, nos arrojan en manos de la dictadura. Hasta Fujimori nombró una comisión, con el recordado sacerdote Hubert Lanssiers a la cabeza, para liberar a los presos injustamente encerrados. Con Bukele bastan unos tatuajes o un chivatazo para que te arrojen al calabozo. Sin olvidar que Bukele negoció con los principales dirigentes de las pandillas para ofrecerles un retiro dorado (Infobae). Ni ‘Blue’ ni ‘Crook’, dos de esos líderes mafiosos, están en el penal de máxima seguridad gracias al trato de favor del ídolo populista.

En esa línea de considerar a la verdad un estorbo, el fujimorismo sigue intentando imponer una narrativa en donde el golpe de Estado de Fujimori y Montesinos fue, delicioso eufemismo, una interrupción. Y lo imprimen en manuales dibujados para repartir en los colegios.

Las sandeces de nuestros políticos –no vale la pena hablar del Congreso con su 90 % de desaprobación– erosionan la poca confianza que los peruanos tenemos en la democracia. Crean un efecto de desesperanza creciente, y colocan a la gente en un despeñadero ante el cual solo queda la huida (más de 400,000 peruanos se fueron del país en el último año) o la resignación ansiosa y depresiva. La opción de lucha, por ahora, pasa por horas bajas. Veremos cuál es el coeficiente de tolerancia de la sandez de los peruanos.

Jorge Bruce

El factor humano

Jorge Bruce es un reconocido psicoanalista de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Ha publicado varias columnas de opinión en diversos medios de comunicación. Es autor del libro "Nos habíamos choleado tanto. Psicoanálisis y racismo".