Macla Yamada Actriz y presentadora de TVDos cosas que no saben de mí: Hago pole dance y tengo a cargo la asociación “Dejando Huella”, conformada por animalistas que luchan por el bienestar de los animales.,Macla Yamada es una actriz de teatro, cine y televisión que incursionó en el doblaje en 2012. En teatro participó en Anastasia, La torre de marfil, Un cuento de cuentos y La odisea. En televisión la hemos visto en ‘Avenida Perú’ y ‘Al fondo hay sitio’, finalmente en el cine en Somos Néctar y Loco cielo de abril. A sus 23 años es una reconocida conductora de deportes del programa ‘Entre Memes’, que se transmite por CMD. Empiezas en la actuación a los 17 años… Sí, con la obra Anastasia. Siempre me gustó el arte. Mi mamá fue bailarina de ballet por 12 años y creo por ahí la vena artística viene. ¿Tengo entendido que querías ser veterinaria? ¡Uy, sí! Soy amante de los animales pero cuando uno va creciendo se va dando cuenta que los sueños hay que trabajarlos. Nada es fácil. Entonces, sin darme cuenta a los 13 años hice un papel en ‘América Kids’ y cuando estuve delante de una cámara, dije: “Esto es lo que quiero hacer”. ¿Alguna inspiración? Vivía enamorada de Key Wesley. Yo quería ser como ella. Key no cree en los prototipos de belleza y no cree en el talento sino en la constancia. Son dos puntos básicos en la actuación. ¿Por qué? Me parece que si uno está muy amarrado a la belleza no puede ser una buena actriz o actor porque uno cambia, es su trabajo. No hay que tenerle miedo a la fealdad de ningún personaje. El otro punto es que puedes tener mucho talento, pero si te duermes en tu talento otra persona te va superar. Además, creo que si un actor no es empático y no tiene sensibilidad no puede ser buen actor. ¿En la TV se exige un rostro bonito para un protagónico? Es que quieras o no en la TV eres un producto. El rating te marca todo. En la TV muchas empresas invierten por eso los rostros bonitos. Estás en ‘Entre Memes’ hace dos años… Es menos masivo que en las épocas que estuve en señal abierta con una novela. Como persona me favorece porque no me gusta mucho que me reconozcan en la calle. Siento que no estoy siendo observada o juzgada. ¿Sabes de fútbol? Aprendí. Ya sé qué siente la gente cuando ve un partido. Viajé a Rusia y ya sé qué significa fútbol. Es la unión de varias cosas y es lo más similar a la vida. ¿Qué papel te gustaría desempeñar? De una persona muda. Es un reto muy difícil. Vuelves con el unipersonal Un amor israelí, del cual haces 20 roles, ¿cómo haces? Es una historia de amor afectado por la violencia política entre dos personas. Hago 20 personajes y uno de mis mayores talentos es mi memoria. ¿Qué personaje te costó hacer? El de Eli, que es un soldado muy rudo, pero el director Gonzalo Tuesta me exigía y me sacó el jugo. La obra va del 16 de agosto, de jueves a domingo, en el Teatro de Cámara del Centro Cultural El Olivar.