En debate. El escándalo de Pura Vida hizo que se ponga en discusión tema. Cuatro proyectos de ley buscan parar uso de la harina para elaborar la leche evaporada.,En los últimos días, muchas madres desconfían de la leche envasada. Lo ocurrido con Pura Vida que no es leche sino bebida saborizada sirvió de detonante. (VER INFOGRAFÍA) El revuelo de la noticia también activó proyectos de ley sobre la composición de productos lácteos. Ayer la Comisión Agraria del Congreso discutió 4 propuestas, entre ellas la del congresista Horacio Zeballos Patrón, para prohibir el uso de leche en polvo en la elaboración de las envasadas en estado líquido, en quesos, y otros. Y es que desde el 2007, las empresas mezclan este compuesto deshidratado con la fresca para hacer la evaporada que finalmente se exhiben en tarros en las tiendas. PUEDES VER: Caso Pura Vida: Defensoría pide que se retire del mercado tarros con imagen de vaca La derogatoria de la quinta disposición complementaria del Decreto Legislativo N.º 653 en el Gobierno de Alan García (2008) dio luz verde. Con ello las importaciones del lácteo en polvo se dispararon. Gloria fue la que más importó entre los años 2010-2012, según AgrodataPerú. Le siguió Nestlé Perú S.A. Solo en 2011 compraron 8 mil toneladas, principalmente de Nueva Zelanda. El legislador arequipeño sostiene que no solo los consumidores son afectados con un producto de baja calidad. También el sector ganadero del país. Explicó que la producción se vino abajo en 25%. La razón, Gloria y Laive prefieren importar en más cantidad leche en polvo por su bajo precio en comparación a la fresca. Leche rematada Por esto, los ganaderos se ven obligados a rematar lácteo líquido. Les pagan entre 90 céntimos a 1.20 soles por litro, cuando el costo de producción asciende a 1.50 soles. "Estamos a pérdida", aseguró Jaime Rivera Camargo, integrante del Comité Regional de Productividad Lechera de Arequipa. Agregó que al utilizar la harina de leche se restringe la compra de la fresca al ganadero. Esgrime que se le engaña al consumidor en las etiquetas de las lata que dicen que es leche evaporada. "Lo que le hacen entender al consumidor es que la leche en tarro es de vaca peruana a la cual le hacen un proceso de evaporación, pero no es cierto. Importan el lácteo en polvo, la reconstituyen (mezclan) con leche fresca nacional en un porcentaje mínimo y grasa anhidra. Eso es lo que venden", dijo el también ganadero de Cayma. Zeballos sostiene que no hay una norma que estipule parámetros para usar la harina en la reconstitución a la leche líquida. Por estos motivos, aseveró que hace varios años disminuyó la ganadería en la campiña y disminuyeron las cabezas de ganado en la región. Hace 4 años se producía un millón de litros al día en la región en los establos que monitorea el Comité Regional de Productividad Lechera. Su coordinador, Rafael Chipana Mercado, precisa que ahora solo se saca 799 mil litros al día. Se quitó arancel Chipana sostiene que antes para importar la leche en polvo se tenía que pagar un arancel. "Este arancel ha sido subsidiado por el Estado para que las empresas lo puedan adquirir a libre disposición. Esto afecta a los ganaderos porque no hay una libre competencia", relató. Añadió que se debe aumentar la producción de leche fresca porque está debajo del promedio que solicita la Organización Mundial de la Salud. Perú consume per cápita 80 a 86 litros, cuando lo que recomienda es 120 litros al año.