Perito constató que el satélite se encontraba en perfectas condiciones de operatividad, El satélite Perú SAT-1 vendido por la compañía Airbus Defence and Space al Perú, cumple con los objetivos exigidos en el contrato suscrito con la Comisión Nacional de Investigación de Desarrollo Aeroespacial (Conida), de acuerdo con una auditoría practicada por el Órgano de Control Institucional (OCI) de dicha entidad. La OCI de Conida depende de la Contraloría General de la República, que es la que autorizó la acción de fiscalización. El reporte de carácter secreto al que tuvo acceso La República, comprende la evaluación del artefacto, el proceso de lanzamiento y su operatividad, y en ninguna de estas tres fases se detectaron observaciones. En la sección “Aspectos Relevantes”, acápite en el que suelen consignar las eventuales deficiencias u otro tipo de novedades sobre la materia de estudio, la auditoría precisa: “De la revisión efectuada a las especificaciones técnicas señaladas en el Compromiso de Suministro (...) (del) Primer Sistema de Teledetección Peruano, no se ha identificado hechos que ponen en riesgo el logro de los objetivos o resultados correspondiente al segmento especial, lanzamiento y terrestre”. El reporte de la OCI de Conida está fechado el 28 de diciembre de 2016, lo que indica que la auditoría se aplicó durante el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski. No se trata de la primera inspección al proyecto del satélite que no ha identificado irregularidades. El 21 de diciembre de 2015, durante la gestión de Ollanta Humala, la OCI del Ministerio de Defensa emitió un informe sobre el proceso de contratación y adjudicación y concluyó que no existió “direccionamiento” a favor de la empresa Airbus Defence and Space. La compra del satélite Perú SAT-1 a un costo de 597 millones de soles se hizo mediante la modalidad de gobierno a gobierno, que elimina la participación de intermediarios que suelen ser promotores de actos de corrupción, como ocurrió en los gobiernos de Alberto Fujimori y Alan García. La Contraloría autorizó a la OCI de Conida que contratase a un experto para la realización de la auditoría, quien tuvo acceso a toda la información que demandó y además tuvo acceso al Centro Nacional de Operación de Imágenes Satelitales (CNOIS), en el kilómetro 50 de la Panamericana Sur, en Pucusana, desde donde se opera el Perú SAT-1. En dicha infraestructura el perito constató que el satélite se encontraba en perfectas condiciones de operatividad, al mismo tiempo que recomendó que se continuara con las evaluaciones de rigor para eliminar cualquier riesgo. Más información en la edición impresa de La República.