La prohibición de publicidad estatal en medios privados.,La ley Mulder carece de fundamento técnico para alcanzar los objetivos que declara buscar, pero es obvio que sí será eficaz en lo que realmente pretenden Fuerza Popular y un sector del Apra: recortar la libertad de expresión como venganza porque varios medios no les hacen propaganda. El proyecto presentado por el congresista aprista Mauricio Mulder prohíbe la publicidad de cualquier entidad del Estado en medios privados, y el funcionario que lo hiciera incurriría en ‘malversación’. El proyecto, cuya exposición de motivos es un tremendo mamarracho, y que ha tenido una aprobación express, sin un debido análisis, tiene el argumento central de que el estado gasta mucho y mal en publicidad. Es, sin duda, una iniciativa ‘sexy’ para la opinión pública, a la que Mulder y su comparsa de Fuerza Popular, partido del cual funciona como jefe de campo, seducen con el argumento del ahorro de recursos para reorientarlos a rubros directamente vinculados a la lucha contra la pobreza. Pero ese es un argumento mentiroso, como quedó demostrado en la conferencia internacional sobre publicidad estatal y medios de comunicación realizada el lunes por el Instituto Prensa y Sociedad (Ipys) y el Consejo de la Prensa Peruana. Con la participación de expertos y del relator especial para la libertad de expresión de la CIDH, Edison Lanza, quedó demostrado, sin dejar de reconocer que hay varios aspectos que debieran revisarse para mejorar la efectividad de la publicidad estatal, que la ley Mulder afecta seriamente el derecho ciudadano a la información; mella el cumplimiento del deber del gobierno a informar; y es discriminatoria e inconstitucional. Pero eso parece interesarle muy poco al sector del Apra que Mulder representa –el de Alan García– y a Fuerza Popular –con la venia de Keiko Fujimori y la participación entusiasta de ese ‘titán’ legislativo que es Héctor Becerril–, pues lo que en realidad buscan es legislar con venganza contra los medios porque sienten que estos no los favorecen con sus coberturas y opiniones. En este sentido, se trata de una ley abiertamente antidemocrática pues lo que busca es debilitar a los medios de comunicación para limitar su capacidad de informar y de opinar. Y lo que no se puede dejar de lado es que esta ley Mulder es parte de un embate mayor contra los medios por parte del Apra y Fuerza Popular que incluye una decena de otros proyectos para recortar la libertad de expresión en el Perú que han sido presentados en el congreso actual.