A un día de celebrarse la audiencia de la Corte IDH, Amnistía Internacional afirmó que el indulto a favor de Fujimori "ha sido un duro golpe para los derechos humanos en el continente".,Amnistía Internacional aseguró ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) que el Estado peruano no ha justificado idóneamente el indulto al exdictador Alberto Fujimori, del cual consideran que es un "duro golpe para los derechos humanos en el continente". La organización presentó un memorial en derecho como amicus curie ante la Corte IDH en el que señaló que "el Estado peruano aún no ha presentado elementos que permitan acreditar las condiciones exigidas para la liberación anticipada del ex presidente Alberto Fujimori". PUEDES VER Este viernes, la Corte IDH verá el indulto a Alberto Fujimori Erika Guevara Rosas, Directora para las Américas de Amnistía Internacional, manifestó que se debe exigir al Estado peruano el cumplimiento de sus obligaciones internacionales en materia de DD.HH. “El indulto a Alberto Fujimori ha sido un duro golpe para los derechos humanos en el continente, y particularmente para las víctimas y sus familiares. Es imperativa la exigencia que se haga al estado peruano para que cumpla de manera íntegra con sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos”, aseguró. “La liberación anticipada, incluso por razones humanitarias, en ninguna circunstancia debe implicar la extinción de la condena ni representar una medida que perpetúe la impunidad”, agregó. Además, la organización informó que acudirá a la audiencia pública que celebrará la Corte IDH este viernes 2 de febrero, para supervisar el cumplimiento de sentencias para los casos Barrios Altos y La Cantuta, específicamente sobre las reparaciones ordenadas por la Corte y relativas al deber de investigar, juzgar y, en su caso, sancionar a todos los responsables de las violaciones cometidas en los casos referidos. Cabe recordar que el indulto concedido por Pedro Pablo Kuczynski al ex dictador el pasado 24 de diciembre generó una ola de críticas y la indignación por parte de diferentes sectores y, especialmente, de los familiares de las víctimas de los casos La Cantuta y Barrios Altos, por los que había sido condenado Fujimori.