El último 9 de febrero, el jugador de la selección peruana de fútbol Christian Cueva retornó, brevemente, a la ciudad de Huamachuco, en la provincia de Sánchez Carrión (región La Libertad), donde vivió su niñez y adolescencia. El ‘Cerebro’ del equipo de todos fue invitado a inaugurar los talleres municipales, donde se dirigió a los niños y les pidió perseguir sus sueños.
Asimismo, en su fugaz paso, se acordó de Eduardo Vargas, el joven que fue bautizado como ‘Celar’, quien se hizo viral tras haber sido víctima de una estafa: denunció ante los medios de comunicación que una persona le ofreció un celular, pero se dio cuenta tarde de que solo era un vidrio bien forrado. ‘Cuevita’, en su momento, le regaló una laptop en un programa de televisión.