Volver a ver
“Si ahora comprendes mejor la Reforma Agraria gracias a un documental, viendo la película de Vélez entenderás mejor lo que vino después, la gesta de resistencia del campesinado peruano contra el horror”.
El verbo “volver” en el Perú tiene una especial carga reparadora. Así como un día miles tuvieron que irse de sus tierras huyendo de la pérdida y del dolor, un día también tocó volver. No volvieron todos, por supuesto, ni para quedarse. Pero volver se convirtió en una acción simbólica, ritual, sanadora, un movimiento de la memoria y de la imaginación. Por eso es tan importante que nuestro cine retorne a esos lugares complejos, para profundizar en la comprensión de lo vivido, dar nuevas luces y completar el proceso de reconciliación colectiva que hoy es para las peruanas y los peruanos una necesidad histórica.
Judith Vélez es parte de esa brillante camada de documentalistas que han construido relatos en donde solo había confusión, prejuicio y olvido. Volver a ver, su documental, que se ha estrenado en Lima (y por culpa de nuestro injusto sistema de distribución en solo dos salas y en horarios difíciles), acompaña a tres fotógrafos de guerra –sí, la guerra que sufrimos todos pero sobre todo las comunidades andinas y amazónicas– en su vuelta al drama humano que sus cámaras retrataron décadas atrás. ¿Qué pasó en las zonas de emergencia, en medio del fuego cruzado entre Sendero Luminoso y el Estado peruano, qué quedó de esas masacres, dónde están los demás?
Vélez recupera la mirada y la sensibilidad de Lentz, Medrano y Balaguer, fotorreporteros/testigos que arriesgaron la vida para denunciar esta lucha desigual. Como dice Lentz, tenían que hacerlo “para que nadie pueda decir que no sucedió”. Si ahora comprendes mejor la Reforma Agraria gracias a un documental, viendo la película de Vélez entenderás mejor lo que vino después, la gesta de resistencia del campesinado peruano contra el horror.