Un pastor evangélico que quiere llegar a la presidenciaSuerte bíblica. El pastor evangélico Alberto Santana Leiva, líder de la Iglesia Cristiana Mundial El Aposento Alto, que pagó 600 mil dólares por los predios de La Victoria, en enero de este año cambió su dirección en el DNI: de vivir en el pueblo joven Néstor Gambetta Baja, en el Callao, ahora reside en la urbanización Camino Real de La Molina.,Decreto de Velasco confirma que terrenos son de Alianza Lima,La fe mueve montañas. También dinero. El 29 de agosto del 2006, el pastor evangélico Nicanor Alberto Santana Leiva hizo un cambio de domicilio en los registros de la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat), un cambio que demostraba que había variado radicalmente de estatus económico. Desactivó la antigua y modestísima dirección donde habitaba, en la manzana A-4, lote 18, del pueblo joven Néstor Gambetta Baja, en el Callao, e inscribió como nuevo domicilio la calle Calatrava 196, en la urbanización Camino Real, en el distrito de La Molina. PUEDES VER Terrenos comprados por evangélicos son de Alianza Lima El 27 de enero de este año, Santana también actualizó sus datos del DNI con la dirección de La Molina. El pastor Alberto Santana es quien compró dos terrenos adyacentes al estadio Alianza Lima, en La Victoria, por 600 mil dólares, el 18 de junio del 2016, poco antes de actualizar su nueva dirección en La Molina. La adquisición la hizo a nombre de la Iglesia Cristiana Mundial El Aposento Alto, que según Registros Públicos constituyó el 5 de noviembre de 1994. En poco más de 22 años, la comunidad evangélica que lidera Alberto Santana ha crecido considerablemente, y no solo en adeptos sino también en fondos. El propio pastor anunció en una reciente alocución ante su feligresía que se preparaba para comprar nada menos que el estadio aliancista en Matute, probablemente para llegar al nivel de la iglesia evangélica Agua Viva, de la familia Hornung Lazo, que por 6 millones de dólares se hizo de la propiedad del coliseo Amauta, en Chacra Ríos, en el Cercado de Lima. Cuando se destapó que la iglesia evangélica El Aposento Alto compró mediante una operación sospechosa dos terrenos que Alianza Lima reclama como suyos, el diario El Conquistador, de propiedad de la organización religiosa, lanzó una campaña para reclamar a la administración del club victoriano que le entregase de inmediato los inmuebles. Santana mandó un aviso directo a la dirigentes: “Considérese la presente como un último aviso para desocupar los bienes que tuvieran dispuestos en los terrenos de nuestra propiedad” para tomar posesión de los mismos. De acuerdo con el acta de compra de los terrenos que consta en Registros Públicos, en la operación entre El Aposento Alto y el supuesto propietario, el anciano de 91 años Julio Saquicuray Pérez, participó la notaria Beatriz Zevallos Giampietri, cuyas oficinas están ubicadas en el distrito de Independencia. Beatriz Zevallos ha intervenido en la constitución de varias organizaciones y empresas de Alberto Santana. El pastor evangélico es un viejo cliente de la notaría de Zevallos. La República buscó a Zevallos, pero se encontraba de licencia; sin embargo, una empleada suya confirmó que participó en la adquisición de los terrenos. Cuando La República le mostró una copia del Decreto Ley 19434, del 6 de junio de 1972, mediante el cual el gobierno de Juan Velasco Alvarado adjudicó al club Alianza Lima el terreno de 39 mil 475 metros cuadrados, la asistente de la notaria Beatriz Zevallos afirmó que ese documento no estaba en el expediente que presentaron las partes, es decir, el vendedor Julio Saquicuray y el comprador Alberto Santana. La notaria Zevallos supuestamente desconocía que Saquicuray le estaba vendiendo al pastor Santana dos terrenos que según la Superintendencia Nacional de Bienes Estatales (SBN), sustentándose en el Decreto Ley 19434, pertenecen al club de fútbol Alianza Lima. Falla de origen “Ese documento no estaba entre los papeles que se presentaron. Lo que trajeron los señores fueron los registros de propiedad a nombre del vendedor Saquicuray”, dijo la empleada de la notaría Beatriz Zevallos. Familiares de Julio Saquicuray afirmaron a La República que no estaba en condiciones de atender una entrevista debido a su avanzada edad y por sufrir una delicada enfermedad. Pero hace poco más de un año, Julio Saquicuray pudo desplazarse desde su residencia en la calle La Huaca 123, en la urbanización La Ensenada, en La Molina, hasta el distrito de Independencia donde se ubica la notaría de Beatriz Zevallos, con la finalidad de estampar su firma y huella dactilar en los papeles de la venta de los terrenos de la explanada del estadio de Alianza Lima. Al respecto La República preguntó a la empleada de la notaría –quien evitó identificarse– si había constancia de que el propio señor Julio Saquicuray se hizo presente para firmar la minuta de la venta de los terrenos, a lo que respondió: “En esta notaría no certificamos nada si no viene la misma persona que figura como propietaria, quien es la que tiene que estampar su huella biométrica y en este caso figura la huella biométrica de la persona que usted me indica (Julio Saquicuray Pérez)”. Este diario volvió a buscar a Saquicuray y la respuesta que obtuvo fue la misma: no estaba en condiciones de salud para responder preguntas. Ni el pastor Alberto Santana ni su vocero Antonio Chauca respondieron a las solicitudes de entrevista que hizo La República. Caja rápida El año pasado, en plena campaña electoral, Alberto Santana no solo adquirió los terrenos de Alianza Lima, sino también respaldó públicamente la candidatura de Keiko Fujimori, como en su momento lo hicieron Agua Viva y el Movimiento Misionero Mundial, organizaciones evangélicas con las que se emparenta por su violento discurso homofóbico: “Si un homosexual va a tener derechos, entonces se va a legalizar el homosexualismo, se va a legalizar el sodomismo. Si se legaliza la homosexualidad, los jóvenes dirán: ‘Mamá, yo también puedo ser homosexual’”. Hay algo más que tienen en común El Aposento Alto, Agua Viva y el Movimiento Misionero Mundial: la organización está bajo el control del fundador y principal pastor de la comunidad evangélica. En el caso de Agua Viva, el apóstol es Pedro Hornung Bobbio, la profeta es su esposa la ex congresista Mirta Lazo Ríos y el pastor principal, su hijo Sergio Hornung Lazo. Respecto al Movimiento Misionero Mundial, el líder indiscutible es el cubano-peruano Rodolfo Gonzales Cruz y comparte responsabilidades con tres de sus hijos: Eliezer, Elías y Debora Gonzales Porro. Alberto Santana sigue la misma senda: sus hijos Cohelet y Yesenia también son pastores y participan en empresas y en instituciones evangélicas de su padre, al igual que su esposa. Las tres organizaciones evangélicas además son los principales animadores del movimiento Con Mis Hijos No Te Metas, que se manifiesta contra la supuesta “ideología de género” y combate las políticas públicas sobre igualdad de género. Pero a diferencia de Agua Viva y el Movimiento Misionero Mundial, El Aposento Alto no se encuentra inscrito en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia. La República pidió entrevistar al pastor Alberto Santana para que explicara el origen de los fondos de El Aposento Alto que le permitieron pagar 600 mil dólares por los terrenos de Alianza Lima, pero no recibió respuesta. Sin embargo, el periodista Jonathan Castro, del portal de investigación Ojo Público, preguntó a Cohelet Santana, hijo del pastor, sobre los fondos de la iglesia evangélica: “Dijo que la prosperidad de su padre se debe a la masiva venta nacional de sus más de 130 libros, de los que asegura que editan más de 10 millares y son vendidos a 25 soles”. Empresa familiar De acuerdo con Registros Públicos, la Iglesia Cristiana Mundial El Aposento Alto está presidida por Alberto Santana y la vicepresidencia la ejerce su esposa Sonia Carbajal de Santana. La secretaria de la organización es su hija Kathryn Santana Carbajal y la tesorera su otra hija, Lucero Santana Carbajal. El primer vocal es su hijo Cohelet Santana Carbajal, el segundo vocal su hermano Isaac Santana Leiva y el tercer vocal su hermana Marta Santana Leiva. El pastor Alberto Santana constituyó el 30 de setiembre del 2015, en la notaría Beatriz Zevallos, la Iglesia Predicadora de la Ley Divina Los Guerreros de Dios. La preside el propio Alberto Santana y en la vicepresidencia designó a su hija Kathryn Santana Carbajal, como secretaria nombró a su cónyuge Sonia Carbajal de Santana y como tesorera a su hija Lucero Santana Carbajal. El 19 de mayo de este año inscribió otra vez en su notaría favorita, Beatriz Zevallos, la Unión Nacional de Iglesias Redimidas Cristianas Evangélicas, encabezada por él mismo. Como secretaria nombró a su hija Kathryn Santana y como tesorera a su esposa Sonia Carbajal de Santana. El 16 de junio también del año en curso, fundó el Ministerio Mundial Asociados, presidido por Alberto Santana y con los cargos distribuidos entre sus familiares: su hijo Cohelet Santana Carbajal como vicepresidente, su hija Kathryn Santana Carbajal como secretaria y su esposa Sonia Carbajal de Santana en calidad de tesorera. El 27 de enero de este año, el pastor Alberto Santana, en una demostración de su visión sobre la homosexualidad, constituyó el Hogar de Restauración Espiritual y Física de Prostitutas, Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales, también en la notaría Beatriz Zevallos. En este caso, los integrantes son otras personas bajo su presidencia: Óscar Esquivel, Frecia Aliaga Cárdenas, Angely Chachi Briceño y Oswaldo Baltazar Palomino. La idea de Santana es comprar el estadio de Alianza Lima no solo para predicar sino también para supuestamente “curar” la homosexualidad, la que considera “una aberración sexual” que debe ser extirpada de la faz de la tierra. El pastor Alberto Santana le ha dado un plazo perentorio al club Alianza Lima para que desaloje sus bienes instalados en los terrenos. Santana se autodenomina Autoridad de las Santas Escrituras Una de las principales empresas de Alberto Santana Leiva se denomina Corporación Jedidias, constituida el 10 de noviembre del 2000. Según Registros Públicos, esta compañía, que se dedica principalmente a la publicación de los libros del pastor evangélico –y que le reporta la mayor parte de sus ingresos, según su hijo, el pastor Cohelet Santana–, se inició con capital de 31 mil soles. Para 2014 consignó 719 mil soles. También ha incursionado en el ámbito de la enseñanza, como Agua Viva y el Movimiento Misionero Mundial. El 11 de junio del 2004 fundó el Consorcio Educativo de la Universidad Internacional Cristiana. Santana suele identificarse como “Autoridad de las Santas Escrituras”, “Ministro de la Paz” y “Doctor”. Pastor quiere conquistar el poder con su partido propio No solo ha comprado un kit electoral con el propósito de participar activamente en política con su organización Perú Nación Poderosa (PNP), sino también ha iniciado una campaña proselitista por diversas partes del país bajo el lema: “Un presidente con fe, que no conoce de imposibles”. La adquisición de los terrenos de Matute y el propósito de adquirir el estadio de Alianza Lima son parte del proyecto político de Santana. La infraestructura deportiva no solo sería destinada a las prédicas religiosas sino también para el proselitismo político, como en su momento hizo Agua Viva cuando invitó a Keiko Fujimori al coliseo Amauta durante la campaña presidencial. La “profeta” Mirta Lazo Ríos de Hornung, una de las cabezas visibles de Agua Viva, llegó al Congreso por Restauración Nacional, del pastor Humberto Lay, pero luego se pasó a Solidaridad Nacional. El pastor de Agua Viva, Juan Carlos Gonzales, fue elegido congresista por Fuerza Popular y actualmente preside la Comisión de Ética. La influencia evangélica en el Congreso por intermedio del fujimorismo es muy fuerte. Hace poco impusieron el Día de las Iglesias Evangélicas el 31 de octubre, a propuesta de la fujimorista Karina Beteta. Para la recaudación de firmas con la finalidad de inscribir su partido y postular a la presidencia, Santana cuenta con la red de sedes de su iglesia en todo el país.