La incapacidad gubernamental de advertir estas reacciones parece una constante.Sin duda, ante el paro que afecta el ingreso a Machu Picchu y el desborde de malestar en las calles, la empresa Joinnus, que había ganado mediante un contrato de menor cuantía a cambio de muchos millones de soles, ha retrocedido en su decisión de operar y ha dejado en manos del Mincul la rescisión del vínculo contractual.
Se trata de una medida empresarial que busca reducir el impacto reputacional de las protestas y un control de daños para minimizar efectos sobre la imagen de la empresa de ventas de tickets para diferentes actividades deportivas y artísticas.
También ya existe una revisión posterior efectuada por la Contraloría que debe evaluar si la negociación entre el Ministerio de Cultura y la empresa tiene validez o si se trata, como han señalado especialistas, de un contrato que vulneró las disposiciones legales del sistema público.
No se trata solamente de una contratación que debe verse con lupa. El gobernador del Cusco señala lo evidente: tiene que ver con el manejo de los recursos provenientes de la principal atracción turística de su región. Es un debate entre la región y el Ministerio de Cultura, que está interviniendo de una manera equivocada y conculcando derechos ciudadanos.
La posición adoptada por el Cusco, protestando y movilizándose en defensa de su patrimonio, era esperable. La incapacidad gubernamental de advertir estas reacciones parece una constante a lo largo de los hechos recientes. La vocación autoritaria que advierte, por ejemplo, la Conferencia Episcopal, parece ser el real fondo en este caso.
La renovación de la tercerización de la venta de entradas para el ingreso a la ciudadela inca primero tuvo que ser debidamente explicada a la población, así como las ventajas y beneficios. Actuar de espaldas a la ciudadanía, sin entender las razones que enarbolan los cusqueños, ha traído como resultado esta situación que bien pudo evitarse. Como en Ayacucho o también en Puno.
Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.