Durante la pandemia se vio el caso de OpenCovid-Perú, una organización de voluntarios, independientes del Gobierno (de la cual fui miembro), que combinaba datos abiertos de la pandemia para informar. Mientras que algunos funcionarios del Minsa tenían conocimiento del impacto real de la pandemia, los números oficiales no reflejaban esto. Me atrevo a decir que sin datos abiertos ni OpenCovid-Perú, nuestro país todavía publicaría números ficticios de defunciones por COVID-19.
Para clarificar, datos abiertos es la idea de que cierta información debería ser accesible a cualquier persona con (1) una licencia explícita que asigna el derecho de leer, modificar y combinar esa información con otras fuentes para crear productos derivados. Adicionalmente tiene que estar (2) en un formato que se puede descargar y sea fácil de consumir.
Esta definición confunde a muchos, porque asumen que un post en Twitter con estadística, o un dashboard en una página web, son datos abiertos. Sin (1) ni (2), no son datos abiertos. Es importante hacer esta distinción, porque comúnmente el poder de los datos abiertos se ve cuando se combinan con otras fuentes. En el caso de la pandemia, OpenCovid-Perú combinaba datos de siete distintas fuentes para tener claridad de los efectos de la pandemia.
En el contexto gubernamental, los datos abiertos brindan transparencia a procesos que tradicionalmente son opacos. La transparencia es el enemigo de la desinformación, por eso en un mundo utópico nadie estaría en contra de publicar datos abiertos. Perú está lejos de una utopía y por eso hubo mucha resistencia de transparentar datos en el 2020.
Aun así, hay que reconocer que en el último año el Minsa ha mejorado increíblemente en los datos que publica. Adoptar este concepto de transparencia digital les ha caído muy bien. Por otro lado, la Plataforma Nacional de Datos Abiertos de la PCM ha aumentado considerablemente la cantidad de datos en su portal. Personalmente estoy esperando a que alguien haga algo interesante con los datos de contrataciones públicas directas. ¿Se imaginan qué se puede descubrir cuando se combine con otras fuentes?
Científico en Computación (California State University) y emprendedor en serie de dos startups en Silicon Valley. 20+ años creando sistemas de información geográfica en compañías como ESRI (ArcGIS), Microsoft(MS Flight Simulator), NVIDIA y AmigoCloud. Creyente (casi fanático) del poder de Open Data (datos abiertos) y Open Source (código libre).