Crisis en Argentina: Los tres tipos de dólares que resurgen en un contexto de devaluaciones
Se viene hablando del dólar blue, el ‘contado con liqui’ y el dólar MEP, pero ¿qué significan y cómo funcionan en medio de una recesión?
Los argentinos viven estos días un constante deja vu, esa sensación de que se repite el pasado, puesto que hace un tiempo, llevaban varios años conviviendo con un “cepo cambiario” impuesto en 2011 por la antecesora de Macri, Cristina Fernández de Kirchner.
El cepo ponía fuertes límites sobre la compra de moneda extranjera, con la intención de frenar una gran fuga de capitales. Mauricio Macri, un fuerte y vocal crítico de esas medidas que definió como “un error”, levantó las restricciones apenas seis días después de haber asumido el mando.
Tres años más tarde, la situación es muy diferente. En medio de una recesión y tras una serie de devaluaciones que hicieron que el peso pasase a tener un cuarto de su valor contra el dólar, el gobierno -que enfrenta elecciones en octubre- volvió a imponer controles para frenar la fuga de dólares.
Aquí te contamos cuáles son las alternativas al “dólar oficial”.
Dólar blue
Con este eufemismo se conoce en Argentina al dólar negro o informal. Para la mayoría de los argentinos, esta es la forma más común de acceder al dólar por fuera de los límites gubernamentales.
Cuando el precio del dólar oficial se mantiene artificialmente bajo a través de medidas como los controles de cambio, el precio de blue es el utilizado como referencia “real” para realizar cualquier transacción en Argentina, por ejemplo la compra de una casa o auto.
Cuando el acceso al dólar oficial es muy limitado, los medios suelen dar a conocer la cotización del dólar blue a la par del oficial y el billete ilegal es ofrecido abiertamente en la calle -aunque con discreción- por casas de cambio informales conocidas como “arbolitos”.
Dólar “contado con liqui”
Así se conoce popularmente a una herramienta financiera que permite cambiar pesos por dólares en el exterior. El proceso, llamado formalmente “contado con liquidación” y también conocido como CCL, utiliza los mercados para acceder a la moneda estadounidense y requiere tener una cuenta externa.
Funciona así: un individuo o empresa utiliza pesos para comprar acciones o bonos que coticen en Argentina y también en otro mercado internacional (por ejemplo, Wall Street). Luego, esos activos se transfieren a la cuenta en el exterior y se venden a cambio de dólares.
Esta operatoria suele realizarse a través de un agente de bolsa y ha servido en el pasado para transferir dólares al exterior cuando se prohíbe o limita a empresas y bancos girar dividendos a sus casas matrices, como vuelve a ocurrir ahora.
No obstante, en su reciente decreto, el gobierno facultó al Banco Central a “establecer reglamentaciones que eviten prácticas y operaciones tendientes a eludir, a través de títulos públicos u otros instrumentos, lo dispuesto” en su medida. Según el diario El Cronista, esto significa que los bancos no podrán acceder a esta herramienta, aunque sí las empresas y los ahorristas.
Dólar MEP
El “mercado electrónico de pagos” (MEP) es una forma de obtener divisas que también utiliza bonos, por lo que esta herramienta se conoce alternativamente como “dólar bolsa”. En este caso los bonos que se compran -también a través de un agente- cotizan en pesos y dólares.
La operatoria es más sencilla: se compra bonos en pesos y se vende en dólares. Pero, a diferencia del “contado con liqui”, el dinero ingresa a una cuenta en Argentina.
Esto lo hace más accesible para aquellas personas que no tienen cuentas en el exterior pero también hace que esos dólares que ingresan estén sujetos a la regulación local. En las próximas semanas se sabrá cuánto dinero se mueve a través de estas formas alternativas de conseguir dólares.