Trucos caseros: ¿cómo limpiar una sartén quemada sin estropearla?
Si tu sartén ha quedado con grandes manchas, te mostramos los mejores consejos para lavarla sin maltratarla y dejarla como nueva.
¿Cómo limpiar una sartén quemada? Es la pregunta que muchos no dejan de hacerse cuando este utensilio de cocina queda con grandes manchas después de tener un uso prolongado o una receta que no salió bien. Por ello, aquí te damos una serie de trucos caseros, opciones y consejos para dejarla como nueva, tal como ocurre con las ollas quemadas.
Si bien limpiar una sartén con quemaduras es algo que requiere de esfuerzo, puede realizarse con insumos sencillos de conseguir. También deberás escoger cuidadosamente las técnicas y materiales a emplear, según las características del objeto, ya que no querrás rallarla.
Papas, sal y aceite de oliva
Aunque parezca extraño, es posible limpiar una sartén quemada con una papa y sal. Esta combinación es un exfoliante natural que elimina la suciedad impregnada sin dañar la superficie de las sartenes. La sal debe ser del tipo gruesa y no la fina que se usa en la mayoría de recetas.
- Corta la papa por la mitad.
- Enjuaga la sartén y trata de quitar los restos pegados.
- Espolvorea la sal gruesa por la superficie de la sartén.
- Frota la sartén con la papa cortada. Restriega sobre la superficie durante unos minutos con movimientos circulares.
- Elimina los desechos con agua.
- Por último, vierte una cucharadita de aceite de oliva y extiéndela por toda la superficie para proteger tus sartenes.
Papa Tumbay. Foto: Andina
Bicarbonato de sodio y limón
El bicarbonato de sodio tiene un poder astringente que te ayudará a remover los residuos de grasa y alimentos que quedaron en la superficie de la sartén. Combinado con limón, desincrusta con facilidad los restos quemados.
- Distribuye el bicarbonato de sodio sobre la sartén.
- Frota media tapa de limón por toda la superficie.
- Restriega durante unos minutos hasta que la sartén adquiera el aspecto brillante que tenía.
- Si las manchas no desaparecen por completo, calienta un poco de vinagre y repite el proceso.
El bicarbonato de sodio es útil y potente para limpiar las manchas que parecen imposibles de sacar. Foto: captura/ Ecoinventos
Vinagre blanco
El vinagre blanco como el bicarbonato de sodio son dos de los productos más utilizados en la limpieza del hogar. Ambos desprenden los restos adheridos de las sartenes y deja la superficie limpia y brillante.
- Vierte vinagre blanco sobre la sartén quemada.
- Añade el agua y ponla a hervir.
- Retira la sartén del fuego y agrega el bicarbonato de sodio. Esto tendrá un efecto efervescente, lo que hará que la suciedad se despegue con facilidad.
- Frota con la esponja y desecha los restos quemados.
- Si aún queda algún residuo pegado, frótalo con bicarbonato de sodio seco.
El vinagre blanco tiene un efecto blanqueador. Foto: cocinafacil
Papel de aluminio y sal
Este truco casero es para limpiar una sartén quemada. Su uso no estropea la superficie y permite eliminar los restos de alimentos que han quedado pegados por el uso.
- Espolvorea una cucharada de sal sobre la superficie de la sartén.
- Haz una bola con el papel de aluminio y frótala en las partes quemadas hasta que el papel quede oscurecido.
- Enjuaga y limpia la sartén con tu lavavajillas habitual.
