Sujetos balean a chofer de bus de Vipusa y atacan otra unidad de la misma empresa en Villa El Salvador

La ola de inseguridad no da tregua en Lima. Al promediar las 8.15 p. m. del lunes 22 de septiembre, un bus de la empresa de transportes Virgen de la Puerta S. A. (Vipusa) fue atacado a balazos por sujetos desconocidos en el distrito de Villa El Salvador. Producto del atentado, el chofer de la unidad quedó gravemente herido tras recibir cuatro impactos de bala.

El hecho ocurrió en la avenida Mateo Pumacahua, a la altura del paradero Lubricante, cerca al parque Huayna Cápac. El cobrador de la unidad, testigo del hecho, contó que sujetos a bordo de una motocicleta interceptaron la unidad cuando se estacionó para dejar pasajeros.

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Tras el ataque, Joel Ramos bajó del bus por su cuenta y se trasladó al hospital en un vehículo particular que puso a disposición un transeúnte. Menciona que los trabajadores no destinaban un monto a la empresa para pagar cupos y las operaciones continúan con normalidad. "Estamos desprotegidos, sobre todo el transporte, la presidenta y los congresistas no hacen nada", declaró el cobrador a La República.

Chofer de empresa Vipusa queda grave tras ser baleado

El herido fue identificado como Leandro Ramos Verástegui (39), chofer de la línea, quien recibió cuatro disparos, dos en el hombro y en la espalda. Producto de la gravedad de las heridas, la víctima fue trasladada de emergencia al hospital de Villa El Salvador, donde su estado es crítico.

Su compañero de trabajo, el cobrador de la unidad, comentó que los pistoleros atacaron el bus cuando este se detuvo en un paradero. “Nos estacionamos para descargar pasajeros y de pronto apareció una moto y le metió cuatro impactos de bala, de los cuales dos le cayó en el brazo y otros en la espalda (…) Su estado es crítico”

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Además, indicó que no sabía si la empresa venía siendo víctima de extorsión. También denunció que el serenazgo apareció recién después de 20 minutos y la Policía casi una hora después. Incluso aseguró que tuvieron que evacuar al chofer en un vehículo particular porque las autoridades no llegaban.

Familiares exigen justicia

Los familiares de Joel Ramos Verasteguí exigen medidas urgentes de seguridad a las autoridades. Contaron que Ramos Verastegui es un conductor profesional con más de 18 años de experiencia y que hace dos meses empezó a trabajar en la empresa Vipusa. El también padre solteroes el sostén familiar de sus dos menores hijos y su madre.

En estos momentos, él se encuentra estable, sin embargo, aún mantiene dos impactos de bala alojados en las costillas y la entrepierna, por lo que sus parientes piden que sea operado lo más pronto posible. Según el cobrador, que estuvo presente durante el atentado, fueron cuatro disparos, de los cuales dos impactaron directamente al conductor y uno rozó la parte del codo. Añadió que no se registraron pasajeros heridos.

"Al momento que ha sufrido el disparo, se ha protegido agachándose y por eso aún lo tenemos con nosotros. Tengo entendido que en este mes son tres intentos de asesinatos de la empresa. Hoy es mi sobrino, mañana serán muchos hermanos más", menciona Basilia Ramirez, tía materna del conductor, quien instó a las autoridades a atender con urgencia la escalada de violencia en el sector transporte.

Minutos antes del ataque a la unidad en la avenida Mateo Pumacahua, otro bus de Vipusa también fue baleado unas cuadras más arriba. Según información preliminar, los atacantes se habrían hecho pasar por pasajeros antes de disparar contra el bus. Tras lo sucedido, la Policía informó que ambos atentados serían parte de un presunto caso de extorsión contra la empresa de transportes.

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Vipusa es víctima de extorsión en Lima Norte

El encargado del paradero inicial de la línea Vipusa manifestó que previo al atentado hubo dos sujetos que subieron a otra unidad del padrón 51 para exigir el pago y le mencionaron al chofer: "¿Van a pagar o no van a pagar?". Cinco minutos después, sucede el ataque contra el bus de Joel Ramos Verasteguí.

Además, reveló que la empresa se encuentra amenazada por bandas criminales de la zona norte y que ahora otra banda de la zona sur estaría buscando cobrar cupo. Son más de 240 trabajadores entre conductores y cobradores, hoy solo han salido a trabajar el 50% de la flota. Los tres trabajadores que fueron víctimas en los atentados anteriores no han logrado regresar a trabajar con normalidad, todos quedaron inhabilitados por sus graves heridas.

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