Luego de dos años, las calles limeñas se volvieron a teñir de morado. El Señor de los Milagros salió ayer por primera vez tras haber estado a puertas cerradas a causa de la pandemia de la COVID-19.
Desde temprano, miles de fieles se reunieron en el centro de Lima a la espera de la procesión del Cristo de Pachacamilla, cuya imagen dejó el Monasterio de las Nazarenas al mediodía.
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Al mismo tiempo, monseñor Carlos Castillo, arzobispo de Lima, compartió un mensaje del papa Francisco hacia el pueblo peruano en conmemoración del mes morado. “Se acerca una fecha linda, un día hermoso para todos ustedes: el Señor de los Milagros sale en procesión por primera vez después de la pandemia. ¡Un gozo para todo Lima! ¡Para todo el Perú!’’.
El pontífice destacó con emoción que el Cristo Morado recorría las calles para ‘’misericordear’'. “Él hoy sale a la calle. Sale a la calle para abrazar a su pueblo (...). Queridos hermanos y hermanas, déjense abrazar por Jesús’'.
Previo a lo dicho por el papa, el arzobispo de Lima también dedicó unas palabras a la multitud. “Queridos hermanos y hermanas, por fin llegamos a reunirnos hoy para salir unidos y hermanados a caminar con nuestro Señor de los Milagros. Como sobrevivientes agradecidos, después de tantos momentos duros en estos dos años, ahora te acompañamos, señor, con paso firme’'.
Precisamente, en esta ocasión el lema que acompaña a los fieles es el de ‘’Sobrevivientes y agradecidos, te acompañamos, Señor, con paso firme’', en homenaje a la población que ha sobrevivido a la pandemia, que en el Perú va cobrando más de 216.000 vidas.
Por él. Padre, hijos y nietos se dieron cita en las Nazarenas. Foto: difusión
En esta primera salida, las andas del Cristo de Pachacamilla, que pesan cerca de una tonelada y media, salieron por la avenida Tacna y continuaron por la av. Emancipación. Luego, fueron por los jirones Chancay y Conde de Superunda. Por la noche, alrededor de las 7:00 p.m., y en medio de aplausos, retornó en hombros al Santuario de las Nazarenas.
Sus siguientes recorridos serán el martes 18, miércoles 19 y viernes 28 de octubre, así como el martes 1 de noviembre. Cabe mencionar que este año, a diferencia de lo que dicta la tradición, la venerada imagen no ingresará a la plaza de Armas debido a los trabajos de recuperación que realiza la Municipalidad de Lima.