Cajamarca atraviesa su peor momento frente a la pandemia. El retorno de miles de personas a esta región, el no haber respetado el distanciamiento social tras la reapertura de las actividades económicas y no haber cumplido cabalmente la cuarentena le ha pasado la factura a esta zona del país que registra casi 14 mil infectados.
Según la Dirección Regional de Salud (Diresa), en solo 4 días los contagios casi se han duplicado. El 27 de julio se registraron 6.795 casos positivos y el 31 del mismo mes, 13.368 infectados. De estos, el 80 % está en Cajamarca (5.017), Jaén (5.016) y San Ignacio (740).
El jefe de la Diresa de Cajamarca, Pedro Cruzado, estima que si se mantiene esta tendencia en dos o tres semanas se tendrá 28 mil personas afectadas.
Al respecto, el gobernador de Cajamarca, Mesías Guevara, señala que este incremento se debe a la gran cantidad de ciudadanos que retornaron a la región. Entre 80 mil y 100 mil personas, la mayoría provenientes de Lima y Lambayeque.
Recordó que durante la cuarentena colocaron tranqueras en zonas de gran afluencia de ómnibus y camiones y que con la ayuda de la Policía, del Ejército y de la Diresa evitaron el ingreso indiscriminado de gente. Incluso se les pedía el resultado de sus pruebas rápidas.
“Ahora entran con una declaración jurada de no estar infectados. Eso ha hecho que se descontrole el número de contagiados”, afirma.
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Oscar Ugarte, asesor de EsSalud, coincide en que existe un fenómeno social que ha contribuido a llevar el virus a Cajamarca, como es la migración de personas que al quedarse sin trabajo retornaron a su tierra.
“Es una las regiones que se está incendiando al igual que otras. Hay un fenómeno general de expansión del virus a través de la migración interna producida hace varias semanas”, explica Ugarte. Agrega que a eso se suma el frío del invierno que baja las defensas de las personas.
Un hecho no menor fue cuando muchos cajamarquinos rompieron la cuarentena el Día del Padre y se juntaron en sus casas o en locales campestres para celebrar.
Según Pedro Cruzado, la reapertura de las actividades económicas también contribuyó a que se acelere el contagio. Comenta que la población salió masivamente a las calles, más aún cuando el 70 % se dedica al trabajo informal.
Tampoco se respetó los estándares de seguridad ni la distancia social en los negocios.
Explicó que la mayoría de los comercios en Cajamarca son espacios muy pequeños, donde no se respetó el aforo.
Mientras tanto, los hospitales de Cajamarca están al límite. El 100 % de las camas UCI está en uso y solo queda el 10 % de las camas hospitalarias. Son tiempos cruciales que esta región debe enfrentar.
Personal de EsSalud, bajo la supervisión de su presidenta, Fiorella Molinelli, realizó ayer en Jaén y San Ignacio pruebas de descarte de coronavirus a adultos mayores, mujeres embarazadas y personas con enfermedades preexistentes. Además la institución trasladó a la zona a 25 profesionales de la salud, 100 mil kits que contienen azitromicina, paracetamol e ivermectina, así como ocho toneladas de Equipos de Protección Personal (EPP) para médicos.
A la par, miembros de las juntas vecinales, ronderos, gobiernos locales y brigadas Covid de la región realizan visitas casa por casa para identificar casos positivos y proveerles de tratamiento médico.
Curva epidemiológica en Cajamarca (julio)
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