Angelina Jolie deslumbró con una gran entrada en los muelles del Hotel Excelsior, en el Lido, posando para los fotógrafos. Su presencia en el Festival de Venecia es para presentar la cinta ‘María’ donde interpreta a la legendaria soprano María Callas. “Para mí el referente eran los fans de Maria Callas, los que aman la ópera, no defraudarlos” ha confesado la actriz a la prensa.
En el famoso festival, la actriz estuvo con su director Pablo Larraín, quien ha declarado a la revista Vanity Fair que Jolie entrenó durante seis meses para prepararse para el papel de Maria Callas. Jolie ha sido nominada dos veces al Oscar como actriz. Ganó por su papel secundario en ‘Girl, Interrupted’ y fue nominada por última vez por su papel principal en ‘Changeling’ de Clint Eastwood. En Venecia podría coincidir con su ex esposo Brad Pitt , que debe llegar el domingo para el estreno de su película ‘Wolfs’.
"'Maria’ completa una trilogía de films biográficos con los que el cineasta chileno Pablo Larraín ha explorado el sino trágico de varias de las mujeres más célebres del siglo XX. Después de ‘Jackie’ y ‘Spencer’ –dos obras que ponían el foco en la cara más macabra de las vidas de Jackie Kennedy y Lady Diana Spencer–, Larraín eleva el listón de su cine para adentrarse, con enorme respecto y un bienvenido pudor, en la última semana de vida de la soprano Maria Callas", reza la crítica de Fotogramas que señala que la cinta "Sublima el dolor y la gloria de Maria Callas".
Angelina en escena de 'Maria'. Foto: Internet
"Resulta difícil no pensar en el cine de Roman Polanski cuando Larraín construye con enérgica elegancia las alucinaciones que sufre Maria, pero el film no deriva en una espiral de degradación, sino que la protagonista mantiene su dignidad intacta en todo momento. El recuerdo de su grandeza se extiende por el presente como un eco demasiado poderoso como para que la realidad presente pueda asordinarlo" agregan y califican la interpretación de Angelina Jolie como 'monumental'.
"Da la impresión de que la actriz construye su personaje desde una comunión visceral. Cuando Callas comparte mesa con John F. Kennedy y le espeta, con cierto desagrado, que ambos pertenecen al pequeño grupo de personas “que podemos ir donde queramos, pero que jamás podremos escapar”, uno siente que Jolie está canalizando a través de Maria su propia voz. De hecho, es la reticencia de Jolie a dejar que Callas caiga en el pozo del patetismo la que inmuniza la película contra el paternalismo y la crueldad", señalan.