Avanza el embate contra el TC y el Ministerio Público.,El fracaso temporal de la vacancia del presidente Pedro Pablo Kuczynski gracias al indulto a Alberto Fujimori no implica que el gran golpe que el fujiaprismo puso en marcha se haya detenido; por el contrario, ahora el riesgo puede ser mayor. Un componente de ese golpe institucional era traerse abajo la presidencia de PPK por su vinculación con Westfield, operaciones que no justificaban la vacancia en el congreso, pero que no deben pasarse por alto pues deben ser revisadas por un órgano competente como la fiscalía. Pero quizá la vacancia no era el objetivo principal del embate institucional lanzado por el fujiaprismo sino otros dos componentes: la defenestración de cuatro magistrados del Tribunal Constitucional y del Fiscal de la Nación en el contexto de las investigaciones lava jato en el Perú. La amenaza al TC sigue abierta. El informe aprobado en la subcomisión de acusaciones constitucionales con los votos fujiapristas fue enviado a la comisión permanente, aunque eso ocurrió antes de la resolución de la CIDH suspendiendo dicho proceso. No es claro, sin embargo, qué hará el grupo fujimorista aún dominado por Keiko Fujimori junto con el Apra, ni si el sacudón político de fin de año ha cambiado las prioridades, aunque lo más probable es que quieran seguir adelante con las sanciones. Por ello, en la ceremonia de hoy a las 11 a.m. en la que juramentará Ernesto Blume como nuevo presidente del TC –y Eloy Espinoza como vicepresidente– se debería destacar la importancia de defender a esa institución frente al embate del congreso. De otro lado, sigue vigente el ataque del fujiaprismo al fiscal de la nación Pablo Sánchez, justo cuando Jorge Barata está por precisar la naturaleza de la relación de Odebrecht no solo con Keiko Fujimori y Alan García –además de Ollanta Humala y Alejandro Toledo– sino, también, con el presidente Kuczynski. Fuerza Popular a través de su ‘topo’ Yeni Vilcatoma ha presentado la acusación contra Sánchez en el congreso pero, también, en el Consejo Nacional de la Magistratura, donde el proceso para defenestrarlo va a fluir con mayor celeridad dada la estrecha vinculación que se ha comprobado que tiene Fuerza Popular, a través de Héctor Becerril, con Guido Aguila, el presidente del CNM. Defender la institucionalidad del fujiaprismo y quizá también del propio gobierno en el marco de la nueva coalición política que puede estar surgiendo del alud del indulto sin vacancia constituye hoy en día una prioridad de la lucha anticorrupción.